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Asturias guarda los esquís: Pajares y Fuentes despidieron la "mejor temporada" en años

Los directores de las estaciones hacen un balance muy positivo de la campaña, que se cerró ayer con poca nieve

Miguel Blanco y María Álvarez cogen el remonte del Brañillín. | A. Velasco

Sin apenas esquiadores, con algunos turistas y con una sonrisa de oreja a oreja. Así se despedía ayer la temporada de esquí en los complejos invernales asturianos de Pajares y Fuentes de Invierno, que desde hoy tendrán sus puertas cerradas al público para trabajar en que la próxima temporada sea un punto de inflexión. Especialmente en Valgrande-Pajares, que espera ver materializarse su gran anhelo, un nuevo remonte mucho más moderno y seguro que los actuales. También en Fuentes se confía en que lleguen novedades de cara al próximo curso, después de que en el actual, con el decimoquinto cumpleaños de la estación, los regalos hayan sido la campaña más larga de su historia, así como batir el récord de usuarios a varias semanas para terminar la temporada.

Los datos oficiales de afluencia tendrán que esperar unos días, pero desde las estaciones ya se apunta a que la recién terminada campaña ha sido “la mejor” en casi dos décadas. Ayer fueron turistas, y algún esquiador suelto –entre Valgrande-Pajares y Fuentes de Invierno apenas llegaron a la veintena–, los que quisieron compartir el último día oficial de esquí en Asturias bajo un tiempo envidiable.

Javier Martínez, director de Pajares, apoyado en el remonte del Brañillín, que cerrará este curso en su formato actual. A. Velasco

En la estación lenense de Valgrande-Pajares, los aparcamientos estaban casi vacíos. Apenas había media docena de coches, algunos incluso de trabajadores. La zona baja estaba prácticamente sin nieve, salvo pequeñas zonas en las que todavía quedaba un poco. Tampoco la zona alta estaba a rebosar, pero al menos daba para que se pudieran abrir unos 600 metros divididos en dos pistas, para que las escasas personas que subieron pudieran pegar las últimas bajadas.

Apenas se divisaba a nadie, más allá de trabajadores, por el complejo lenense. Sin embargo, en una de esas pequeñas “islas” de nieve, aparecía una familia. Manuel Vega, un leonés nacido en Ciñera y residente en Pola de Gordón, había decidido llevar a Pajares a su familia. Sus hijos y su nieta, que pasaron la Semana Santa visitando a los abuelos, los acompañaron para conocer Pajares. “Quise traerlos aquí, donde yo subía de pequeño. Llegué a estar con más de tres metros de nieve cuando era guaje”, comentaba, mientras su nieta se resbalaba en el pequeño espacio nevado. “No sabíamos que hoy era el último día de la temporada, pero ahora, sabiendo que el año que viene habrá un remonte nuevo y moderno, seguro que vendremos a verlo y a subirnos”, apuntaba la familia, que aprovechó para fotografiarse en la nieve o junto a la estatua homenaje al fundador de la estación “Chus” Valgrande.

Manuel Vega con su familia, en uno de los pocos espacios con nieve. A. Velasco

Poco después del mediodía aparcaba en el parking “de arriba” Miguel Blanco, un leonés que es monitor de la escuela de esquí. Llegaba a la estación junto a su madre, María Álvarez. Tenía que hacer papeleo en la escuela de esquí, y aprovechó para realizar las últimas bajadas: “Ha sido una gran temporada, ya nos la merecíamos. Ahora tenemos muchas ganas de que llegue la telecabina, porque las instalaciones necesitan una renovación”. En su cara reflejaba la alegría por una gran temporada mientras se calzaba las botas, cogía su tabla y se montaba en el Brañillín, en lo que será uno de sus últimos viajes en este remonte.

Jorge Fernández, director de la Estación invernal Fuentes de Invierno. Lne

Los directores de las estaciones de esquí también se mostraban contentos con esta campaña que ayer terminaba. Javier Martínez conversaba con sus trabajadores, que en verano tendrán que aplicarse también en las tareas para preparar la llegada del nuevo telecabina a Valgrande-Pajares. En un parón, reconocía a LA NUEVA ESPAÑA que esta temporada “ha sido muy buena, ha estado marcada por muy buen tiempo y ha sido la más larga en casi dos décadas”. De igual forma, desde Fuentes de Invierno, Jorge Fernández también alababa la campaña: “Hemos tenido muchos visitantes, hemos batido récords de la campaña más larga, de más usuarios y todo ello en el decimoquinto aniversario de la estación”. “Es para estar contentos”, afirmaban ambos, en su último día de campaña. Y en lo que también coincidían, en el agradecimiento a visitantes y trabajadores por una campaña “excepcional”. “Ahora esperamos que las que vengan sean también así”, apuntaban los dos, para cerrar el curso.

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