“Estamos orgullosos de ser la fuente que da de beber a Asturias pero pedimos que sean corresponsables con nosotros. No pido otra cosa y espero y deseo llegar a buen puerto”. Lo dijo ayer Miguel Ángel Fernández Iglesias, alcalde de Caso, en el marco de las negociaciones que mantiene con el Consorcio de Aguas de Asturias (CADASA) y el Principado, en relación a las compensaciones que recibe el concejo por tener en su territorio el embalse de Tanes, que abastece de agua a buena parte de Asturias.

Fernández Iglesias lanzó una cifra, “tres millones de euros anuales con la actualización del IPC”. Es muy superior a los 180.000 euros que recibe ahora el Ayuntamiento de Caso, además de otros 30.000 euros para obras en los pueblos del entorno del pantano, concretamente Tanes, Abantru y Coballes. Pero en realidad el alcalde va más allá de una cantidad económica concreta. “No puede ser todo dinero”, aseguró el regidor, que subrayó que lo que quiere “es más dinero, pero también un compromiso con el territorio”. “Cambio dinero por puestos de trabajo porque lo que queremos es que la gente joven de Caso tenga una oportunidad para quedarse en su concejo; y se la deben dar”, aseveró, para insistir que “es lo único que pido. Y eso es más importante que el dinero que pueda llegar al Ayuntamiento de Caso”. El alcalde insistió una y otra vez que el Ayuntamiento “defiende a los vecinos y el territorio”.

Fernández Iglesias hace un llamamiento a la “colaboración” entre el Principado, Cadasa, EDP y el Ayuntamiento de Caso. “No están entendiendo lo que pedimos”, dijo para continuar explicando que “nosotros hacemos un esfuerzo muy grande y sé que ellos también lo hacen, pero deben ser corresponsables con nosotros, el esfuerzo tiene que ser de todos”.

En Caso, explicó el alcalde, se perdieron 300 puestos de trabajo con la creación del pantano de Tanes. Por eso “ahora exijo lo que piden los vecinos porque no podemos seguir administrando miserias”. Fernández Iglesias puso un ejemplo: “Desde noviembre tenemos un argayu en Pendones que nos costaría 130.000 euros arreglar y con un presupuesto de 1,4 millones de euros no lo podemos hacer”. “Lo único que pedimos es que alguien haga un esfuerzo o, si no, que nos digan que lo que tenemos que hacer es marchar de esta tierra”.

Respecto al uso lúdico del pantano casín, el alcalde aseguró que “queremos calidad, no cantidad” y defendió que se puedan celebrar competiciones organizadas por la Federación Asturiana de Piragüismo. “Si entra una empresa, eso no va a ser rentable y acabará fallando pero la Federación nos garantiza esa cantidad”, aclaró el primer edil casín.

El uso lúdico del pantano ha sido motivo de discrepancias entre el presidente de Cadasa y vicepresidente del Gobierno regional, Juan Cofiño, el Ayuntamiento de Caso y la Consejería de Medio Rural. Cofiño rechaza de forma tajante que las embarcaciones no cautivas (aquellas que hayan navegado en aguas fuera de Tanes) pudieran hacerlo en el pantano de la localidad casina. Si no se permiten no se podrían desarrollar competiciones deportivas, que fueron aceptadas por la resolución de la Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial que regula el uso lúdico y deportivo en el embalse. Será la Confederación Hidrográfica del Cantábrico a quien corresponda la autorización.

El Ayuntamiento ha sido un firme defensor de las pruebas, que serían organizadas por la Federación Asturiana de Piragüismo, y considera que si no se autorizan finalmente “se condena el proyecto antes de su nacimiento, al hacerlo económicamente inviable para aquellas iniciativas que puedan surgir para su gestión”.

La Corporación municipal lamenta las “trabas injustificadas” que está sufriendo la navegabilidad del embalse.

Gutiérrez Solís: “La oposición al embalse en los años setenta fue el germen de la unión vecinal”

El histórico militante comunista y exlíder vecinal Vicente Gutiérrez Solís depositó ayer en el Ayuntamiento de Caso toda la documentación que tenía de la lucha de los vecinos contra el embalse de Tanes en los años 70. “Nos puede ayudar a entender que las asociaciones de vecinos sirven para mucho”, aseguró Gutiérrez Solís, que explicó que “la oposición al embalse fue el germen del asociacionismo y la unión vecinal porque aprendimos que es necesario que la gente participe en asuntos que le están dañando”. En esa línea de argumentación, Gutiérrez Solís defendió que “si se quiere desarrollar esta democracia tiene que ser sobre la base del compromiso y la participación, las organizaciones políticas deben tener en cuenta la inquietud de los vecinos”. ” Hay que crear unidad para seguir avanzando”, concluyó. Entre la documentación aportada estaban todos los datos de las expropiaciones de terrenos afectados por el negocio. En este sentido, el alcalde de Caso , Miguel Ángel Fernández Iglesias aseguró que cuando se hizo el embalse, en 1973, “se perdieron sobre 300 puestos de trabajo y ahí empezó el abandono de la tierra, no quedaba otra, había que marchar de aquí”. Por eso, con la entrega de toda la documentación conservada por Gutiérrez Solís el alcalde invitó “ a volver a pensar, a recapacitar”. Y la primera conclusión que él mismo saca es que “esto no fue una venta, fue un territorio usurpado durante 99 años. Y en aquellos tiempos valía hacerlo así pero de esos 300 puestos de trabajo que se perdieron, no han sido capaces de generar ni un solo empleo en esta tierra”.