Xenia Veiga fue la primera en entrar ayer al nuevo parque de la Mayacina, en pleno centro de Mieres. Lo hizo casi antes de que los operarios municipales quitasen la cinta y dejasen pasar a las autoridades. La niña y sus amigos llevaban unos minutos esperando y tras probar toboganes, rocódromo y columpios, lo tenía muy claro: “Es el mejor parque de mi vida”. “Los demás están enguarrinaos y no molan”, explicaba. “Antes íbamos al parque Jovellanos y ahora tenemos esto, que ha cambiado mucho de ser un aparcamiento a esto”, añadía la pequeña.
Su amigo Raúl González Mesa vive justo enfrente del nuevo parque, así que estaba encantado “porque solo tengo que cruzar la calle”, celebraba. El niño reconocía que después de ver las máquinas trabajar durante tanto tiempo “tenía muchas ganas” de estrenar el parque. “De ser un aparcamiento que estaba lleno de piedras a ser un parque, está muy guay”, concluyó.
Ese fue uno de los aspectos que destacó el alcalde de Mieres, Aníbal Vázquez, que aseguró que “se ha recuperado un espacio para los mierenses y en este momento me acuerdo de los vecinos que durante años y paños tuvieron que estar aguantando el polvo del viejo aparcamiento”. Vázquez subrayó también que el parque “se ha diseñado con la participación de muchos mierenses”.
De gestionar todo el proceso se encargó la concejala de Desarrollo Urbano Sostenible, Delia Campomanes. La edil se remontó a los inicios del proyecto, allá por 2017 “y ahora, tras varios años de espera ha llegado el momento de que lo disfruten todos los mierenses”
Niños, jóvenes, mayores, deportistas o aquel que simplemente quiera tumbarse en el césped a leer un libro, tienen desde ayer un espacio de 130.000 metros cuadrados a disposición en el centro de Mieres. La obra ha costado 742.746,42 euros más IVA y ha sido financiada con fondos Feder.
