Dos de los tres proyectos presentados por el Ayuntamiento de Langreo para optar a fondos europeos gestionados por el Instituto para la Transición Justa ya habían sido remitidos a una convocatoria anterior del Ministerio para la Transición Ecológica destinada a compensar el cierre de las centrales térmicas. En aquel caso no obtuvieron financiación. Ahora el Consistorio vuelve a enviarlos para otra línea de ayudas, ésta con más presupuesto que la anterior, con 91 millones de euros frente a los 7 precedentes. A la convocatoria de subvenciones pueden acceder 184 municipios inmersos en procesos de transición energética.
Los dos proyectos que se vuelven a presentar son la construcción de una planta de compostaje destinada al tratamiento de residuos vegetales y la reforma del matadero comarcal, que en esta ocasión se plantea sin uso definitivo posterior, que tendría que ser analizado más adelante. En la otra convocatoria de ayudas se planteaba destinar el edificio del antiguo macelo de la Mancomunidad Valle del Nalón, ubicado en Frieres, a centro de transferencia de productos agroalimentarios tras su recuperación.
La subvención que ahora solicita el Ayuntamiento de Langreo asciende a cerca de 2,9 millones de euros. El Consistorio ha presentado los tres proyectos a la convocatoria abierta por el Instituto para la Transición Justa y destinada a iniciativas municipales para infraestructuras ambientales, sociales y digitales. Las iniciativas seleccionadas se financiarán con cargo al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, recursos adicionales de la Unión Europea para hacer frente a la crisis económica derivada de la pandemia.
De las actuaciones, la destinada a la rehabilitación del matadero sustituye al parque fluvial del Nalón en terrenos de la térmica de Lada que se pretendía remitir para optar a financiación. Finalmente, el Ayuntamiento renunció a presentar esta iniciativa, que se desarrollaría en más de cuatro hectáreas de superficie que Iberdrola cedería.
La Alcaldesa, Carmen Arbesú, justificó esta decisión por ser un proyecto muy complejo, del que se recibió "una cantidad copiosa de documentación" en poco tiempo, que no se pudo analizar a tiempo. Además, añadió, "existe el riesgo de que los trabajos no llegaran a concluirse" y "el Ayuntamiento se vería obligado a incluirla en sus presupuestos para acabarla". La Confederación Hidrográfica del Cantábrico había elaborado el proyecto, cuyo coste es de cuatro millones, la máxima ayuda que se podría conceder en la convocatoria.
Para la rehabilitación del edificio del matadero, que cerró en 2018, el Consistorio solicita 1.991.502 euros. La construcción de una planta de compostaje destinada al tratamiento de residuos vegetales cuenta ya con una subvención de 466.000 euros del Ministerio para la Transición Ecológica. Ahora se solicitan 400.000 euros. El tercer proyecto es la habilitación de una senda en el entorno de la mina La Pipiona, cuyo coste es de 491.581 euros.
