El gobierno local de Mieres siempre ha insistido, desde su llegada, en hacer un Mieres para los peatones y los ciudadanos. Y entre sus planes de reorganización vial, se encontraba la peatonalización del entorno de la plaza de abastos. Un proyecto que será una realidad a lo largo del año 2023. Y es que el alcalde en funciones ya ha firmado un decreto para la licitación, que en los próximos días saldrá en la plataforma de contratación del estado, de las obras de peatonalización de las calles Doce de Octubre y Escuela de Capataces desde sus entronques con Manuel Llaneza hasta los cruces con Carreño Miranda. Un proyecto que requiere de una inversión superior al millón y medio de euros. "Era una obra que teníamos pendiente, y que ya por fin vamos a poder poner en marcha", explicaba Manuel Ángel Álvarez.
El entorno de la plaza lleva cerrado al tráfico desde la primavera de 2020. La pandemia hizo que los planes del gobierno municipal se acelerasen, y procedió al cierre provisional de estas calles para facilitar el tránsito de los peatones durante el confinamiento y la desescalada. Una medida que se tornaría definitiva, con la señalización, en septiembre de ese mismo año, de la prohibición de circulación de vehículos, salvo para el acceso a cocheras y para carga y descarga de productos y materiales en la plaza de Abastos.
Ahora, el proyecto da un paso más, y en las próximas fechas se procederá a la licitación de los trabajos, una obra con un presupuesto de más de 1,5 millones de euros. La iniciativa permitirá que desaparezca la actual calzada, convirtiéndose el entorno de la plaza de Abastos en un eje peatonal al cien por cien, siguiendo así con las políticas de sostenibilidad establecidas en la Agenda 2030 de la Unión Europea que respalda el Ayuntamiento de Mieres.
Tal y como avanzó este diario, el proyecto conllevaría la eliminación de las actuales calzadas, la ampliación de las aceras, y la construcción de un único carril de rodadura central para usuarios de cocheras y para carga y descarga. El consistorio aborda el proyecto con fondos propios, aunque no descarta acudir a alguna de las líneas de ayudas que están publicándose tanto a través de la administración estatal como de fondos europeos. En su momento, la Viceconsejería de Infraestructuras, iba a aportar una inversión de 50.000 euros al proyecto, pero finalmente se destinaron a otras obras de accesibilidad en el concejo.
Zona azul
La peatonalización de la plaza de Abastos de Mieres es otro de los proyectos de reorganización vial que desde el Ayuntamiento se están llevando a cabo en los últimos años. En concreto, se desarrolló una red de aparcamientos disuasorios, con la construcción de hasta cuatro parkings (Oñón, La Pista, el Sinagua y La Mayacina, este último en dos espacios), que dan cabida a unos 700 vehículos y que, además, en orden al impulso de la movilidad sostenible, todos ellos cuentan con estaciones de carga para coches eléctricos o híbridos.
Además, este plan de aparcamientos se va a modificar próximamente, ya que el aparcamiento de Oñón, que fue el primer en ejecutarse, que da cabida a unos 300 vehículos, y que hoy es aún de plazas libres, pasará a formar parte de la red del peculiar sistema de zona azul de Mieres, dejando el estacionamiento restringido en todo el casco urbano en más de medio millar de plazas.
Al contrario que en la mayoría de las grandes ciudades, la zona azul de Mieres es gratuita. Hace unos meses, se establecieron zonas de aparcamiento que, gestionadas a través de máquinas expendedoras de tíquets o de una aplicación móvil, permiten el estacionamiento gratuito durante dos horas diarias, tras lo que el usuario debería cambiar de zona para poder sacar otro tíquet ese mismo día, algo que es posible gracias a que hay que registrar la matrícula en el sistema.
