El Principado apunta a que las obras de consolidación en la torre de Soto, ejecutadas este verano gracias a una inversión conjunta del Gobierno autonómico y el Ayuntamiento de Aller, no serán las últimas. En unas declaraciones a este diario sobre los trabajos, el director general de Cultura y Patrimonio, Pablo León, hace referencia a "futuras inversiones" en el entorno. Aunque la Consejera, Berta Piñán, ya había apuntado en esa dirección, es ahora el responsable patrimonial del Principado el que recoge el guante lanzado por el Ayuntamiento tras los descubrimientos realizados en el entorno de la torre. Se hallaron restos de una muralla y piezas cerámicas y de metal del siglo XII.
León explicaba que "de manera simultánea a la realización de las obras de consolidación de la torre medieval de Soto, llevadas a cabo en los últimos meses gracias a la colaboración entre el Ayuntamiento de Aller y la Consejería de Cultura, se puso en marcha una labor de investigación arqueológica y de lectura de paramentos que permitió definir todas las fases constructivas desde el periodo medieval hasta las restauraciones contemporáneas".
En este sentido, agregó que "en el exterior, con motivo de la construcción de la zanja de drenaje, se han documentado las cimentaciones de estructuras anexas a la torre que todavía están pendientes de interpretar correctamente". "De manera general, indican con toda claridad que la torre que hoy vemos no fue una estructura aislada, sino que formó parte de un complejo de edificaciones más elaborado, como se observa habitualmente en otros ejemplos mejor conservados", apuntaba Pablo León.
Hizo referencia, además, a la construcción anexa a la propia torre. "La limpieza del edificio anexo ha permitido también descubrir que se trata de una construcción de origen más antiguo del que se suponía, es decir, que no se trata de una vivienda de época contemporánea, sino que seguramente tiene un origen en la época moderna, con ampliaciones posteriores", indicó, para finalizar: "Esto tendrá que ser tenido en cuenta en futuras intervenciones". De esas palabras se desprende que el Gobierno regional ya valora la posibilidad de acometer nuevas campañas arqueológicas en la zona, tal y como pidieron desde el Ayuntamiento y también los propios arqueólogos.
León quiso explicar en qué consistió la restauración de la torre, con un presupuesto cercano a los 300.000 euros. "Se ha consolidado el edificio desde su cimentación y se han asegurado las diferentes grietas históricas existentes.
También se ha aprovechado para marcar con el mortero de restauración las diferentes fases del alzado conservado para distinguir la parte correspondiente a las restauraciones contemporáneas. También se ha restaurado la techumbre del hórreo existente en este solar", finalizó el director general de Patrimonio.
Los propios arqueólogos que participaron en los trabajos revelaban a LA NUEVA ESPAÑA al término de la obra la importancia de los hallazgos que se han producido en la localidad allerana. "En Soto tenemos un conjunto histórico único en Asturias y que tiene un potencial enorme para trabajar y descubrir nuevas cosas", explicaba entonces la arqueóloga Patricia Suárez Manjón, que destacaba, además de lo que citaba el propio Pablo León, que la propia torre de por sí supone un enclave único.
"Tenemos una planta mixta, con un plano recto y otro curvo, algo que no es habitual. De hecho, no sabíamos si esta forma se habría dado en el origen de la torre o en las reformas posteriores, pero tras analizar y llegar a los cimientos, vimos que se había construido así desde el principio", indicó la arqueóloga. La torre de Soto espera que sigan descubriendo sus secretos.
