El Principado aprobó en 2017 la declaración del poblado minero de Bustiello como Bien de Interés Cultural (BIC). La decisión se tomó avalada por el incuestionable interés histórico y social de un enclave esencial para entender el paternalismo industrial del siglo XIX. También se valoró, aunque en un grado menor, el capital artístico de las numerosas construcciones que dan forma al asentamiento promovido por el Marqués de Comillas. Este último atractivo se está viendo emborronado por la aparición de infinidad de pintadas. 

Los grafitis hace ya tiempo que se extendieron por el sanatorio del poblado, muy afectado, por otra parte, por el deterioro de los inmuebles que integran este valioso complejo, que además del viejo hospitalillo minero alberga una vieja escuela y una botica, esta última, casi derruida. Ahora, una gran pintada ha aparecido en el centenario puente de piedra de Bustiello. “No podemos permitir que estos actos vandálicos se extiendan por todo el poblado”, señalan los responsables de “La Pudinga”, la asociación que vela por el sostenimiento de los bienes públicos del BIC.

Una de las pintadas del sanatorio D. M.

Las pintadas se están poco a poco apoderando de los inmuebles públicos de Bustiello, el enclave con mayor potencial turístico de Mieres. El problema arrancó en el sanatorio. Los grafitis se han propagado casi al mismo ritmo que las ortigas por este histórico enclave. “Al final todo forma parte de la desatención que sufre este valioso legado cultural”, explican Manuel Alberto Vicente, portavoz de la Plataforma Salvemos el Sanatorio. “No solo hay numerosas pintadas por todo el exterior de los edificios, también el interior está repleto de grafitis”, apunta.

El sanatorio de Bustiello, cuya titularidad corresponde al Principado de Asturias, es uno de los inmuebles más llamativos del poblado. El edificio data del año 1902 y muestra elementos modernistas en su fachada. “Parece ser que hay quien piensa que la manera de rejuvenecer las instalaciones es llenarlas de grafitis, mientras la estructura se viene abajo”, lamentan los vecinos. 

Las pintadas hace tiempo que forman parte del decorado del sanatorio de Bustiello, pero ahora parecen querer “adornar” el resto del Bien de Interés Cultural mierense. La nueva y enorme pintada se localiza en la basa del puente, el cual data de 1890. “Tal vez por desconocimiento se hace un gran daño a una construcción de gran valor y belleza, ya que las paredes del viaducto son preciosas con su almohadillado de piedra”, remarcan los vecinos.

La pintada del puente. A. V.

La asociación “La Pudinga” ha presentado una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Ujo y se ha informado a la Policía Local de lo sucedido. Ambos cuerpos incrementarán la vigilancia en Bustiello y ya están investigando lo sucedido. Hay incluso sospechosos. En caso de que el autor sea identificado, se enfrenta a importante sanción ya que en España la protección de los Bienes de Interés Cultural está recogida en las leyes de patrimonio elaboradas por cada comunidad autónoma, que se basan en la Ley de Patrimonio Histórico Español de 1985. En el caso de Asturias, cualquier tipo de intervención sobre un bien sin autorización que suponga su destrucción o cause una pérdida de su valor, está considerado por la legislación autonómica como una infracción grave. En estos casos las multas oscilan entre los 3.005 y los 150.000 euros. Se considera «muy grave» la infracción en el caso de que se trate de una destrucción intencionada y cuando se produzcan daños a yacimientos o restos arqueológicos. Las multas pueden llegar hasta los 900.000 euros.

Preocupación

El emborronado BIC de Bustiello tiene muy preocupados a los vecinos. Y es que no faltan espacios atractivos en la localidad. Junto al puente, muy representativa es la iglesia. El templo fue inaugurado en 1894. “Cualquier día aparecerá también llena de pintadas”, lamentan los portavoces de la comunidad.