"In a few days". O lo que traducido al castellano significa en unos días. Fueron palabras de uno de los técnicos austriacos que la empresa Doppelmayr ha enviado a Valgrande-Pajares para trabajar en la revisión y control de calidad de la nueva telecabina con la que contará la estación lenense. Los trabajos ya han comenzado y será dentro de pocas jornadas cuando, por primera vez, se comience a mover el cable y arranquen las pruebas de carga, que deberían de estar finalizadas para inaugurar el nuevo remonte para las Navidades.
La estación lenense, como ya viene siendo habitual en los últimos meses, desde que arrancasen las obras de construcción de la telecabina, era martes un constante ir y venir de vehículos con trabajadores, que se empeñaban en dar los últimos remates al montaje. Son sabedores de que las labores van a contrarreloj, ya que en el momento que comience a nevar, hacer cualquier tipo de trabajo será aún más costoso que ahora. Por ello, deben aprovechar antes de que las primeras nevadas hagan su aparición. Las obras están prácticamente terminadas, a falta de detalles como panelar el hangar de las cabinas, tareas que se están llevando a cabo, o la citada revisión por parte de los técnicos austriacos, que llegaban el lunes por la mañana.
Durante los próximos días, las labores se centrarán especialmente en la comprobación del funcionamiento de todos los sistemas instalados y en el chequeo en profundidad del remonte. La primeras pruebas que se están realizando son análisis de los sistemas eléctricos, electrónicos y de los programas de manejo del remonte que, una vez puesto en marcha, quedará en manos de los trabajadores de Valgrande-Pajares. Esas primeras labores por parte de los técnicos austriacos de Doppel estaban siendo satisfactorias. El propio director de la estación lenense, Javier Martínez, explicaba que "lo que se va a hacer es simular cualquier tipo de situación que se pueda dar en el remonte, para ver que todo funcione y que todo responda como debe". "Se le va a poner al límite", señalaba.
Una vez comprobado el funcionamiento de todos estos dispositivos, incluyendo también las alarmas acústicas, se pasará ya al arranque del corazón de la telecabina. El motor comenzará a mover los casi cuatro kilómetros de cable instalados y que será la "carretera" por la que circulen las cabinas. Unas cabinas que también se pondrán ya en la línea para comenzar con las pruebas de circulación y carga, lo que tendrá lugar, a tenor de lo escuchado a los técnicos austriacos, en los próximos días.
Innivación
Respecto a la nieve artificial, sistema que se dañó con las obras de construcción del remonte, la previsión es poder arreglarlo también en los próximos días. El problema estuvo en la zona de la base del complejo, donde al instalar la estación motriz de la telecabina, se rompieron algunas canalizaciones tanto de agua como eléctricas. "La prioridad es instalar la telecabina, porque esperamos que se pueda esquiar cuando haya nieve, pero desde luego que el sistema de innivación se va intentar tener listo también para la fecha de apertura", señalaron desde el complejo lenense.
Con todo, y pese a que el estreno del remonte, tal y como aseguró el propio presidente del Principado, Adrián Barbón, está previsto para Navidad, lo cierto es que el ritmo actual de los trabajos podría adelantar ese plazo. Eso sí, todo dependerá de la climatología. Sin ir más lejos, durante la jornada de hoy, en la zona baja de Valgrande-Pajares, donde se ubica la estación motriz de la telecabina, estaba despejado y había una temperatura "llevadera". En la cota más alta, donde se levanta la cafetería y la estación de retorno, el viento soplaba con una fuerza moderada y el frío había generado una importante y peligrosa capa de hielo.
