Fallece a los 85 años el cantante langreano Roberto González, integrante del "Cuarteto Torner"

La música vocal está de luto tras perder este lunes a uno de sus referentes, José Roberto González Zapico, miembro fundador del "Cuarteto Torner" y exintegrante también del Coro Santiaguín y del Coro San Andrés "Sergio Domingo". Fallecido a los 85 años en su Langreo natal, los que le conocieron destacan de él su gran voz, su pasión por la música y su sentido del humor.

González fue conocido, sobre todo, por ser uno de los componentes del prestigioso "Cuarteto Torner", formación nacida en 1983 y que se mantuvo activa hasta 2018, fecha en la que abandonó los escenarios por el fallecimiento de otro de sus integrantes, Emilio García. A lo largo de esos 35 años, la formación grabó 46 discos, protagonizó 2.135 actuaciones dentro y fuera de España y obtuvo numerosos premios y reconocimientos, entre ellos el de "Asturiano del mes" de octubre de 2008 de LA NUEVA ESPAÑA por su labor en la defensa de la música popular.

Los inicios en la música de González, natural de Ciaño, fueron tempranos. Formó parte del coro del colegio de La Salle del distrito langreano y, posteriormente, formó parte durante un cuarto de siglo del Coro Santiaguín. En 1983 fundó el "Cuarteto Torner" junto al también tenor Luis Estada; Arsenio Fernández-Nespral (barítono); y Emilio García (bajo). Además, desde 1995 y durante cinco años, compaginó su presencia en el cuarteto con su paso por el Coro San Andrés "Sergio Domingo" de El Entrego.

Profesionalmente, empezó a trabajar en las oficinas del pozo Samuño y fue oficial de topografía en Hunosa hasta su retiro, en 1992. Gran aficionado al fútbol, pasión que combinaba con la música, destacó en su juventud como extremo izquierda y era gran aficionado del Unión Popular de Langreo, el Real Oviedo y el Real Madrid, según relata el que fuera su compañero en el "Cuarteto Torner", Arsenio Fernández-Nespral. "Era una persona con un gran sentido del humor, que conectaba muy bien con el público y con la gente en general por esa forma de ser tan abierta que tenía. A nivel musical, poseía una gran voz y muy buen oído, lo que le permitía coger cualquier pieza al vuelo. Es una pérdida enorme".

En términos similares se pronunció su otro compañero en el «Cuarteto Torner», Luis Estrada. «Roberto era un cantador que se acoplaba a cualquier coro. Tenía una segunda voz como tenor perfecta. En el cuarteto nuestras voces empastaban muy bien. Estuvimos 35 años juntos y los recuerdos son muy buenos». Tuvieron tiempo de conocerse bien dada la gran cantidad de ensayos y actuaciones que compartieron. «Recuerdo que un año tuvimos 92 actuaciones en un mes, cantando hasta dos y tres veces al día y siempre existió entre nosotros muy buena camaradería y ahí radicaba también parte del éxito. Como todos nosotros, Roberto disfrutaba cantando». Al igual que hizo Fernández-Nespral, Estrada destacó la simpatía y el gran sentido del humor de González. «Era muy buena persona y disfrutó mucho de la música y de la vida».

También la Federación de Coros de Asturias (Fecora), a través de su presidente Marcelino Martínez, «Santi», resalto el legado de Roberto González. «Ser uno de los pilares del ‘Cuarteto Torner’ ya es algo muy importante para la música en Asturias porque son una referencia de la tradición musical en la región. También fue un integrante sobresaliente de los coros San Andrés y Santiaguín, un hombre dispuesto siempre a contribuir a que la música coral tuviese siempre el nivel que tiene en Asturias y que hacía siempre fácil el trabajo a los directores con los que cantó».