El policía destinado en Langreo al que reclaman un millón por presuntos impagos y estafas inicia su periplo judicial

Este mes afronta su primer juicio civil por apropiarse de máquinas de "vending" por valor de 100.000 euros | En marzo, el primer proceso penal

Las instalaciones de la Comisaría de Langreo-San Martín del Rey Aurelio, en La Felguera. | J. V.

Las instalaciones de la Comisaría de Langreo-San Martín del Rey Aurelio, en La Felguera. | J. V.

L. Díaz

El próximo 12 de diciembre comienza el periplo judicial del policía nacional adscrito a la Comisaría de Langreo-San Martín del Rey Aurelio y residente en Laviana que se enfrenta a una decena de acusaciones por presuntos delitos de estafa e impagos. El primero de estos juicios, que tendrá lugar en Gijón, es de carácter civil. En él, un empresario le reclama aproximadamente 100.000 euros por el impago del material de una empresa de "vending". Este mismo mes de diciembre, además, se ratificará en el juzgado de Laviana otra de las denuncias por impagos contra el agente. En total, las cantidades que se le reclaman al policía en los diversos procesos judiciales abiertos superan el millón de euros.

Tras la sesión de este mes de diciembre, el agente deberá afrontar dos denuncias de carácter laboral, que por el momento se encuentran en el Fogasa (Fondo de Garantía Salarial). De no haber acuerdo, estas denuncias pasarán al ámbito judicial. Se trata de la reclamación de un extrabajador por el impago de salarios y por no haber sido dado de alta en la Seguridad Social. El agente, según los denunciantes, era propietario de la empresa Eurofinance 777 SLU, que entró en concurso de acreedores acumulando cuantiosas deudas. Se trata de una compañía inicialmente enfocada a las inversiones bursátiles, que acabó derivando su actividad hacia las máquinas de "vending" en bares y establecimientos hosteleros. Tras su quiebra, se fundó una segunda empresa del sector, denominada Principado Vending. En este proceso de cambio se teme que se hubiera podido incurrir en un posible delito de "insolvencia punible".

A estos procesos prácticamente inmediatos hay que sumar también el juicio, de carácter penal, fijado para el próximo mes de marzo, en el que el agente será juzgado por presunto delito continuado de estafa. A continuación se procedería con las denuncias presentadas por un exempleado por "atentado contra el honor". Una segunda empleada del agente, ahora residente fuera de España, también habría denunciado su caso ante la autoridad laboral. Al igual que el otro extrabajador, no habría tenido contrato de trabajo ni nóminas, cobraba de forma esporádica y además habría sufrido "acoso". De hecho, se está analizando la posibilidad de presentar una denuncia por "acoso sexual", ya que según explicó en su denuncia ante Inspección de Trabajo llego a tocarle "el trasero". Las personas que ya han iniciado sus procesos judiciales contra el agente afirman que puede haber "más víctimas" de sus impagos, "es posible que existan distintos casos que todavía no han sido puestos en conocimiento de los tribunales". Aseguran que el policía se aprovechaba de su trabajo como agente de la ley para "ganarse la confianza" de la gente, a la que convencía para realizar inversiones o para prestarle dinero.

La Policía Nacional tiene abierta una investigación interna, ya que para que un agente pueda tener actividades al margen de su trabajo es necesario "solicitarlo, analizar si son compatibles con el cargo y no entrar en conflicto con la labor policial".

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