Lo apuñaló, desmembró el cuerpo y lo guardó en bolsas en la nevera, así fue el crimen del descuartizador de Langreo

Una puñalada en el corazón acabó con la vida de C. S. P.

David Orihuela

David Orihuela

Langreo

Javier R. E. mató a C. S. P., descuartizó el cuerpo y lo guardó varios días en bolsas en la nevera de la casa que compartían. Ante el temor de ser descubierto, fue tirando las bolsas en el entorno de la casa, en Langreo. La Fiscalía del Principado de Asturias, Sección Territorial de Langreo, sostiene que el hombre investigado por la muerte y posterior descuartizamiento de su casero en Langreo en marzo de 2024 "lo apuñaló sin que la víctima tuviera opción a defenderse y, tras desmembrar el cuerpo, lo guardó varios días en la nevera". El Juzgado de Instrucción n.º 1 de Langreo celebró este lunes una comparecencia en la que las partes trasladaron al investigado sus correspondientes imputaciones, tal y como recoge el artículo 25 de la Ley Orgánica del Tribunal del Jurado. En el momento procesal oportuno se formulará el correspondiente escrito de acusación, con la concreción de hechos y penas solicitadas.

El investigado vivía en el domicilio de C. S. P., en Langreo, en una habitación alquilada. El Ministerio Fiscal sostiene que, "durante la madrugada del 17 al 18 de marzo de 2024, el investigado, tras mantener una discusión con C. S. P. en la vivienda, le asestó al menos tres puñaladas en el tórax, una de las cuales penetró en el corazón a la altura del ventrículo izquierdo y le provocó la muerte. Lo hizo sin que la víctima pudiera defenderse de ninguna manera, utilizando un cuchillo o instrumento punzante".

El relato de la Fiscalía señala que "una vez hubo acabado con la vida de C. S. P., con una radial o instrumento similar, el investigado desmembró el cuerpo de la víctima, introdujo las distintas partes en bolsas, que conservó durante unos días en la nevera del domicilio. Ante el temor a ser descubierto, comenzó a arrojarlas en matorrales y zonas próximas, hasta que se produjo el hallazgo de las mismas".

La Fiscalía considera que los hechos pueden ser constitutivos de un delito de homicidio o asesinato, conforme en lo dispuesto en los artículos 138 y siguientes del Código Penal.

El investigado se encuentra en prisión provisional comunicada y sin fianza a petición de la Fiscalía al entenderse tras su detención que existía un alto riesgo de reiteración delictiva, riesgo de destrucción u ocultación de fuentes de prueba y riesgo de fuga.

En un primer momento el acusado aseguró no recordar nada de lo que ocurrió, que "iba muy drogado". Es lo que afirmó al ser detenido pocas horas después de que se localizase parte del cuerpo en una huerta cercana a la vivienda que compartían víctima y supuesto asesino en el barrio de El Villar, en Langreo.

Los vecinos vieron varias veces al presunto asesino cargando con bolsas de basura por el barrio. También con un carro similar al que utilizan los repartidores de bebidas. Ese carro que apareció junto a unas cocheras. Los vecinos le preguntaron dónde estaba la víctima y les contestó primero que en el HUCA, luego que en la cárcel y finalmente que había sido secuestrado "por los rusos". Todo mentira. Estaba muerto.

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