Una veintena de damnificados por la explosión de Mieres aún viven en la residencia del campus

La normalización del barrio de La Villa sigue avanzando, aunque para una veintena de personas la vuelta a casa todavía llevará un tiempo. Los vecinos de las casas más afectadas por la gran explosión de gas ocurrida el pasado 3 de marzo siguen en la residencia del campus de Mieres, a la espera de que se resuelva la situación de cada familia damnificada. El Ayuntamiento está tramitando el realojo de algunos de ellos en viviendas de emergencia, tal y como anunciaba el Principado una semana en Mieres. Otros esperan una decisión definitiva sobre el estado los inmuebles dañados, con algunos de ellos presentando ciertos riesgos que deben ser valorados por las compañías de seguros. "Seguimos trabajando en ofrecer las mejores soluciones", apuntó la vicealcaldesa y concejala de Derechos Sociales, Teresa Iglesias.

Mientras, la concejala responsable del área de Desarrollo Urbano Sostenible, Marta Jiménez, explicó que, desde un punto de vista técnico, el trabajo del Ayuntamiento está prácticamente terminado: "ahora serán los seguros los que tengan que entrar en juego y realizar las tramitaciones necesarias". La edil precisó que hay cuatro inmuebles, que suman una decena de viviendas, que requieren de un "certificado de seguridad" que deben de emitir las aseguradoras para que vuelvan a ser ocupados. "Estos edificios presentan algún tipo de riesgo y por eso es necesario que se emitan estos certificados para poder dar permiso para que vuelvan a vivir en sus casas", dijo.

Jiménez añadió que desde el Ayuntamiento también se han emitido los requerimientos de obra para facilitar que otra parte de los afectados, los vecinos con viviendas dañadas pero que sí pueden acceder a las mismas, comiencen ya con las obras de reparación, para que puedan volver a la normalidad de sus vidas a la mayor brevedad. "Por nuestra parte, técnicamente, ya hemos realizado casi el cien por cien de lo que dependía de nosotros, tanto en la evaluación de los edificios como en la emisión de estas órdenes de ejecución para poder realizar las obras", zanjó la concejala.

Vigilancia y heridos

El alcalde de Mieres, Manuel Ángel Álvarez, confirmaba que desde hace un par de días se ha retirado la vigilancia policial en la zona, sin que hubiera que lamentar ningún expolio. Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han estado más de 15 días, con sus 15 noches, velando porque no se produjeran robos en las viviendas afectadas. Aunque hubo alguna tentativa, en los primeros días especialmente, la vigilancia surtió efecto y no hubo ningún asalto. Ahora, las viviendas quedan protegidas con vallas y cierres.

En cuanto a los heridos, los ingresados en Asturias ya han sido dados de alta en su totalidad, y solo queda hospitalizada la mujer en estado más grave, que fue trasladada a Madrid con quemaduras en el 30 por ciento de su cuerpo.