La calle Alfonso Camín queda cortada al tráfico para proceder a su rehabilitación integral

"No hay ni una sola calle para bajar hacia el centro entre Barredo y la iglesia de San Juan, no entiendo la falta de previsión". Son palabras de un vecino de Mieres ante el cierre de la calle Alfonso Camín para proceder a su rehabilitación. Unas obras con un presupuesto cercano al medio millón de euros y que entrañarán restricciones en el tráfico durante los próximos meses. Los trabajadores comenzaron este mismo lunes a levantar las aceras, que serán objeto de renovación, al igual que la propia calzada.

Esta calle es una de las vías más utilizadas de Mieres, pues se trata del único tramo en casi un kilómetro que permite unir dos de las principales vías: Ramón y Cajal y Valeriano Miranda, en sentido descendente. Por ello, los conductores se mostraban este lunes molestos con lo que consideran una falta de previsión por parte del Ayuntamiento a la hora de regular el tráfico debido a las obras. "Para ir al médico, por ejemplo, hay que dar una vuelta tremenda", se quejaban los vecinos, que piden que mientras duren los trabajos, se habilite alguna calle para poder bajar hacia Valeriano Miranda. Las restricciones al tráfico durarán varias semanas, aunque los propietarios o usuarios de los garajes que hay en la citada vía podrán seguir accediendo a los mismos.