Ciaño, indignado por el abandono: los vecinos alertan del peligro de dos edificios centenarios que se caen

"Un día van a matar a alguien", temen los residentes que viven al lado de los bloques, tomados por la maleza y con árboles saliendo por las ventanas

Elena Arias ante los dos edificios abandonados. | D. O.

Elena Arias ante los dos edificios abandonados. | D. O.

David Orihuela

David Orihuela

Langreo

Suena a chiste pero no tiene ninguna gracia. Se llama Calle Nueva, en Ciaño, pero su aspecto no hace honor al nombre ni mucho menos. En ella hay dos edificios completamente abandonados. Fueron nuevos hace más de un siglo y ahora suponen un verdadero quebradero de cabeza para los vecinos.

Los números 10 y 12 de la Calle Nueva se construyeron en 1920, como aún se puede leer en la puerta del número 10, pero llevan abandonados más de dos décadas y en ese tiempo la naturaleza ha ido tomando su interior, y no en sentido figurado: por las ventanas del segundo piso salen las ramas de los árboles que crecen dentro de lo que un día fueron viviendas.

Elena Arias vive en el número 8, en el tercer piso. Su casa está pared con pared con uno de los edificios abandonados y eso ya le ha ocasionado problemas. Desde la calle se aprecia perfectamente cómo la humedad de un edificio se va extendiendo al otro. "El año pasado tuve que pintar toda la casa y ya está todo fatal otra vez, tengo los muebles destrozados", explica la vecina, que ya se ha puesto en contacto en numerosas ocasiones con el Ayuntamiento de Langreo para pedir una solución que por ahora nadie le ha dado.

De lo que más se quejan los vecinos no es de las humedades, sino del peligro de accidentes. "Un día va a matar a alguien", advierte Elena Arias. El mal estado de los edificios hace pensar que podrían derrumbarse, pero ya no es solo eso, "es que ya han caído tejas, algunos canalones y otros elementos de las construcciones". Tan es así que el tramo de acera que está justo delante del número 12 está cerrada al paso. En realidad no se puede pasar por la maleza que ha ido creciendo entre los adoquines porque las vallas que se colocaron para garantizar la seguridad de los peatones parecen llevar años tiradas en el suelo y han pasado a integrarse en el paisaje.

Los vecinos piden al Ayuntamiento de Langreo "que tome medidas antes de que ocurra una desgracia". Llevan años reclamándolo y nadie les ha hecho caso. No entran en si los edificios tienen dueño, si están declarados en ruina o no, pero entienden que el Ayuntamiento debe velar por la seguridad de todos los vecinos de Langreo y en Ciaño los hay que se sienten abandonados. "El Alcalde debe recordar que muchos de los votos con los que ganó las elecciones salieron de Ciaño", advierten los vecinos. El regidor langreano mantiene una estrecha vinculación con este distrito, ya que durante años ejerció de párroco en la localidad.

La Calle Nueva lo fue hace décadas, ahora amenaza ruina y los vecinos no quieren llegar a tener que lamentar algún accidente con graves consecuencias.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents