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Carlos Cuesta

A contracorriente

Carlos Cuesta

Ganar espacio social

El desarrollo urbanístico de Pola de Laviana y las posibilidades del plan Arcadia 2030

El Plan de Movilidad Arcadia 2030 es un proyecto de notable envergadura para alcanzar un modelo armónico, saludable y social en Pola de Laviana. Una manera de lograr las calles para sus habitantes con un espacio peatonal amplio en la zona central con carriles bici y un moderno aparcamiento de unas 400 plazas. Esta iniciativa pionera en Asturias para poblaciones españolas que ronden las 10.000 personas cuenta con una dotación cercana al millón de euros y está sufragado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional. Este plan de renovación urbana convertirá a la capital del Alto Nalón en una localidad de referencia internacional y ejemplar para avanzar en el transporte sostenible con reducciones de CO2.

Vista aérea de Pola de Laviana. Carlos Cuesta

Una aspiración loable y estupenda de llevarse a efecto. Con ese deseo la Pola ganaría espacio para disfrute del vecindario con renovadas conexiones entre zonas, barrios y el centro poblacional, lo que redundaría en una villa moderna, agradable, segura y de servicios. Y si se lograra convertir el río Nalón a su paso por la localidad en un cauce cuidado y con un paseo estético con barandillas y dotado de servicios prácticos pues este diseño urbano ganaría enteros y podría decirse que la Pola se convertiría en una Ciudad Jardín. No obstante, lo verdaderamente interesante es conseguir que ese proyecto cristalice y que las diferentes actuaciones de rehabilitación de entornos sean una pronta realidad. Pola de Laviana, sin llegar al mundo feliz de Aldous Huxley, puede ser una villa con entidad, abierta y orgullosa de su momento.

Su ubicación la convierte en un centro atractivo y cargado de razón paisajística y orográfica con las moles de Peña Mea y Peñamayor escoltando un precioso anfiteatro por donde discurre el río Nalón, el Melsos romano y padre de los cauces fluviales norteños. Ojalá este proyecto sea un hecho tangible y la vecindad conozca de motu proprio una cirugía urbana avanzada para satisfacción de todos, parroquianos y forasteros. Un espacio peatonal para pasear, parlamentar y realizar críticas constructivas sobre ideas en acción. Y puestos a reformar, un campo de fútbol con nuevo diseño, la recuperación del Cine Maxi, una estación terminal de autobuses y unas Tolvas renovadas, la Pola alcanzaría la armonía y el estilo de urbe animosa y ejemplar con la cultura, el deporte y el comercio como improntas básicas. Para muchos, una forma de vivir en el Paraíso. ¡Que lo veamos!

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