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Silencio absoluto

Hay temas, como la corrupción, sobre los que el PP debe dar explicaciones

Silencio absoluto

El Partido Popular se refugia en el pasado y no tiene nada que decir sobre la tercera sentencia de la Caja B. Mientras, su presidente da la callada por respuesta y, cuando habla, es para decir que son cosas del pasado, y que ya pagaron por ello. De lo que se olvida es de que ni pidieron perdón, ni devolvieron el dinero.

Él, personalmente, que dice que es el pasado, siempre estuvo en cargos de responsabilidad; como cuando era diputado y cobraba 50.000 euros de asesor de justicia, por una carrera que aún no se la habían regalado. Por eso nunca comprendió a los mileuristas.

Mariano Rajoy dijo en su momento que la Gürtel “NO” era una trama del PP, sino “CONTRA” el PP. Sin embargo, por tercera vez se les sigue acusando, y ello a pesar de los problemas de independencia de la justicia española. Aún quedan juicios pendientes. En otro país ya estaría ilegalizado, se habría cambiado el nombre para lavar la cara y empezar de nuevo. Pero aquí les sobra con el silencio por respuesta.

A la par de la llegada de la condena por corrupción, nos llega otra noticia de la que tampoco le gusta hablar al PP. Se trata de la ley de la Memoria Histórica (tanto es así que tiene pensado derogarla en cuanto llegue de nuevo al poder).

Esta es la historia del fusilamiento de 17 personas (16 concejales más el alcalde).

En el pueblo de San Fernando, el 18 de julio del año del golpe de Estado español (ese que justificaba el señor Casado en su convención con exministros franquistas y les reía las gracias), la Marina entra a saco en las instituciones, entre ellas el Ayuntamiento, y encarcela a todos los concejales y al alcalde. Después de repartirlos por diversas cárceles de España, fueron todos asesinados y tirados a una fosa común. Hoy en día se están haciendo trámites con algún hijo que todavía vive en busca del ADN para ver si se puede identificar a estas personas, que siguen lamentablemente tiradas en una fosa común que más bien parece un estercolero.

Fue tanto el terror que causaron los asesinos que consiguieron que ni en las casas donde faltaban familiares se hablara de ello, simplemente silencio sepulcral. Tuvieron que pasar muchos años para que esto se supiera. Aunque todos los mayores del pueblo conocían la historia, nadie se atrevía a decir una solo palabra. Además, no solo acabaron con sus vidas, también usurparon los bienes, casas y fincas de los fusilados, dejando a sus familias en la absoluta pobreza. Hoy en día una nieta de estos concejales preside el Ayuntamiento de una ciudad bastante importante de Cataluña.

Estos son los silencios del PP: contra la corrupción, la callada por respuesta. Contra los golpes de Estado se callan y no abren viejas heridas.

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