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César González Antuña

El plato que inventó "La Nina"

El relato de cómo Aniceta Fueyo convirtió les cebolles rellenes en un emblema de El Entrego

El 10 de noviembre de 1972 fue la fecha en la que nació una nueva fiesta gastronómica en Asturias: les Cebolles Rellenes en El Entrego. Al decir de la crónica, fue el preámbulo de la primera prueba de una fiesta, aunque sería el día 30 de noviembre, festividad de San Andrés, cuando se celebrase la fiesta gastronómica.

La idea del evento la personalizó José Manuel Blanco Braña, por entonces presidente de la Comisión de Festejos de El Entrego. Estando reunidos sus miembros, de una manera sencilla propuso: "¿Y por qué no ponemos en marcha la fiesta de les Cebolles rellenes?". Todos estuvieron de acuerdo con la idea propuesta por el presidente, simplemente porque este plato era único y exclusivo de El Entrego.

La presentación se hizo en vísperas de San Martín, pero realmente la fecha de celebración sería el día de San Andrés, patrono de El Entrego. De esta forma pasaba a la lista gastronómica al lado de las fechas del Desarme en Oviedo, el queso Cabrales en Arenas, los callos y picadillo de Noreña, les fabes en Moreda, los Nabos en Sotrondio y la sardina de Candás.

Es El Entrego el único lugar de España que ofrece este curioso plato a los visitantes, desde que un día de los ventitantos a la Nina se le ocurrió, sin saber qué poner de comida un viernes santo, día de vigilia, hacer "unes cebolles rellenes de bonito".

En el año 1923 formaron matrimonio Alfredo Antuña Montes y Aniceta Fueyo Zapico. Hacia 1926 el Ayuntamiento compró la finca de La Laguna con la vista de dotar al lugar de un parque público. El matrimonio adquirió un local cerca del lugar y tras un breve tiempo destinado a mueblería, cambió su uso y lo abrió como sidrería hacia el año 1927 con el nombre La Laguna.

"La Nina", doña Aniceta Fueyo Zapico, era propietaria y cocinera del Bar La Laguna y relataba cómo fue la idea de cocinar este plato. "Yo estaba en la cocina sin saber qué poner de comida. Y se me ocurrió la idea de rellenar unes cebolles con bonito y ponerlas a guisar. También se hacen con carne, pero sin duda las mejores y las mas sabrosas son las de bonito. Saqué una prueba para unos clientes y gustaron mucho. Pocos días después los comensales que venían al bar empezaron a pedirme este plato y no tuve más remedio, que incluir en la carta cebolles rellenes". "De aquellas primeras cebollas rellenas surgió hacia 1968 la fábrica que las vendía, digamos, por todo el mundo. La fama del plato se extendió, principalmente, por los chigres de la zona, pero el liderazgo de preparar les cebolles rellenes, aparte de nosotros, Bar La Laguna" recaía también en Casa La Conda, que "han consolidado este menú, que en el transcurso de los años se extendió no solo en El Entrego, sino por España e incluso en el extranjero".

Doña Aniceta, para sus amigos "La Nina", al recordar cómo creó su plato, no le daba importancia a su mérito como cocinera y contaba estas cosas con la mayor naturalidad del mundo. De nuevo acudimos a su propio relato: "Lo que más me emociona es que llegue uno de Bélgica o Alemania y me diga que han visto un bote de cebolles rellenes en un supermercado de esos países y que ellos se llevaran una alegría al ver comida de El Entrego. ¿No es fenomenal, que los belgas y alemanes puedan comer unes cebolles rellenes que inventé hace muchos años?". El día 30 de noviembre de 1972, primer día de la celebración, todos los que llegaron a El Entrego fueron obsequiados con una tapa de cebolles rellenes. Aunque no era festivo local el ambiente estuvo asegurado para resaltar la jornada. Ese día se recomendaba el uso de la montera picona. Entre los numerosos actos y para todos se anunciaban animados bailes en las salas Madison y Linares.

La crónica de Manuel Llana en LA NUEVA ESPAÑA era rematada de la siguiente forma: "De este primer día, la celebración del día de les Cebolles Rellenes, más que una exaltación de un plato típico de El Entrego, se debe convertir en un merecido homenaje a Doña Aniceta Fueyo Zapico ‘La Nina’. Medio siglo preparando cebolles rellenes para el agradecimiento de los estómagos asturianos y del mundo".

El 31 de mayo de 2009, El Bar La Laguna de El Entrego cerró sus puertas. Pero el plato de "La Nina", les Cebolles Rellenes, quedó para la posteridad.

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