Una Navidad más

Soy enfermera del hospital Valle del Nalón. Estamos inmersos en unas fiestas que para unas personas son bonitas, pero para otras dolorosas, bien por situación familiar o propia . Nos pintan la Navidad como tiempo de felicidad, paz y alegría. Y no siempre es así .

El personal sanitario conoce de cerca el dolor y el sufrimiento. Y sabemos que en estas fechas hay pacientes que están ingresados en el hospital y no pueden pasar estas fiestas con su familia. Intentamos crear un ambiente navideño como si fuésemos esa pequeña familia y aunque hay momentos muy duros, como cualquier día del año, y pacientes muy enfermos también en fase terminal, perder a un familiar en estas fechas es si cabe más duro ún .

Quiero hacer mención también a esos ancianos que están en su hogar que pasan solos la Navidad. Una soledad muchas veces obligada por abandono de su familia. Aunque expresarlo en esta carta sea muy duro, existen estas situaciones y más de lo que pensamos .

Recordar también a esas mujeres que están en centros de acogida, que por motivos muy duros tienen que estar ahí. Estoy segura de que el personal hará todo lo posible por minimizar ese dolor .

También una especial mención a los niños en general, pero especialmente a los que están pasando por un proceso oncológico. Esos niños son los grandes guerreros porque, a pesar de estar pasando por una lucha muy dura, siempre tienen tiempo para una sonrisa. Y esa lucha se opone a la realidad que se vive en la calle en estos días. No nos olvidemos que la Navidad es principalmente mágica, y más la vivida por los niños. Sin ellos no sería lo mismo. Son momentos de esperanza, que todo mejore y ningún niño tenga que pasar por una enfermedad así .

El personal de enfermería da cobertura 24 horas. Siempre y en esta época tenemos una implicación mayor para esos pacientes que, irremediablemente, tienen que pasar estas fechas en el hospital. Una vez más queda claro que cuidamos, curamos, protegemos y somos los que transmitimos esa ilusión dentro del hospital .

El momento más especial de estas fechas es cuando aparece el día de la cabalgata ese Rey Mago que visita a los pacientes y les entrega caramelos. Resulta muy gratificante ver a esos ancianos. Sobre todo, cómo les cambia la cara y, por un momento, recuperan la ilusión y la magia de cuando eran niños.

La cara amarga de estas fechas es el consumo de alcohol y drogas, que, desgraciadamente, aumenta. Consumo que en el caso del alcohol se normaliza. No podemos obviar que este consumo está socialmente aceptado, y la población no es consciente de que es una peligrosa adicción, como cualquier otra. Y está causando estragos, sobre todo en población demasiado joven. Por favor, precaución .

Muchas gracias y felices fiestas para todos.

Suscríbete para seguir leyendo