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Poesía

La palabra encendida de Marwan

Todos mis futuros son contigo, segundo poemario del músico madrileño

La palabra encendida de Marwan

Consciente de que hay palabras que poseen brillo y vida propia, el músico Marwan se inició en la literatura con el poemario La triste historia de tu cuerpo sobre el mío. Su ópera prima cosechó un éxito y unas ventas insospechadas para este madrileño, del que ahora ve la luz en una potente editorial Todos mis futuros son contigo. Una obra que supone un tratado emocional y pasional, un modo emotivo de interpretar la realidad. Según sus propias palabras, "la literatura es un espacio para compartir en el que en algún momento alguien siente lo mismo que tú. Yo mismo me reconozco en muchas obras ajenas. En un momento concreto alguien siente lo mismo que tú. Admiro esa capacidad emocional de unos latidos fuera de toda ciencia de explicación emocional. Se debe llevar luz a la sombra y poner bombillas a lo inexplicable".

El poemario no está exento de crítica y denuncia social, tomadas como una férrea decisión personal como él mismo justifica: "Cada uno tiene que elegir. Pienso que además de trasmitir belleza tengo unos deberes sociales como ciudadano e igual que una cámara dar una visión particular que no dan los medios de comunicación".

La dualidad músico-escritor es para Marwan una desbordada fuente creativa, que fluye por las aguas transparentes de la necesidad y siempre encuentran cauce: "A veces me entra una duda entre componer una canción o un poema; así que si tengo una guitarra a mano opto por la música. Compongo con esa relación entre ambas artes. Musicalmente hago canción de autor y tengo esa obsesión poética. Por medio de la palabra hay un núcleo común en la forma y el fondo".

Como enrevesada conquista en la creación aparece la originalidad; una meta imprecisa porque "no es obligado, pero yo lo busco. Todos buscamos las mismas emociones desde Homero. Pero trato de precisar un toque personal y de frescura que no suene a rancio".

Para la publicación de su primer libro Marwan optó por fundar su propia editorial, llamada "Noviembre". Un fenómeno que avala la creciente irrupción de los sellos pequeños. "En poesía hay varias editoriales que vienen empujando muy fuerte, y que han logrado que algunos escritores consigan un éxito impensable e inusitado. Yo lo he comprobado y voy a seguir editando con la mía. Facebook o Twitter facilitan la información rápida de un poema breve que cabe en una foto como una onda expansiva e instántanea. El paso a una editorial potente ha sido muy natural y sincronizada, me ha quitado trabajo y permitido publicar en América Latina", afirma.

La educación sentimental deja la impronta de un antes y un después, el artista madrileño resume la suya así:"Empecé escuchando a los cantautores de la vieja escuela como Serrat, Sabina o Silvio Rodríguez. Posteriormente conocí a Ismael Serrano y fue como una explosión interior, y me impresionaron nuevos compositores próximos a mi generación como Jorge Drexler,Quique González o Pedro Guerra. En la poesía empecé con autores clásicos como Mario Benedetti, Miguel Hernández o Neruda. Luego me empapé de poetas actuales como Benjamín Prado, Luis Alberto de Cuenca, García Montero. Podría citar infinidad, pero entre la última poesía me quedo con Carlos Salem, Pedro Andreu, Vicente Gallego o Juan José Téllez".

El papel de Madrid como atractivo y estridente cóctel cultural ha sido notablemente mermado en la actualidad pese a que"hay arte por todas partes. Pero faltan espacios ya que se han cerrado salas de conciertos y galerías de arte. No hay ayudas; todo es autogestión. Por poner un ejemplo los cines se han convertido en centros comerciales. A pesar del espíritu de la gente, que lleva a convertir pisos en microteatros, no hay ley de mecenazgo ni política cultural. El IVA y el IRPF han hecho la vida imposible al cine y la música".

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