La vuelta al mundo del rey Zibeline garantiza al lector una experiencia que muchos títulos ofrecen sin conseguir: más de 350 páginas de aventuras, en la mejor tradición de la novela histórica, aderezadas con un sutil conocimiento del ser humano y presididas por una figura singular, la del noble eslovaco, Mauricio Augusto Benyovszky (1746-1786). A lo largo de su corta pero muy intensa vida, Benyovszky fue oficial austriaco, coronel polaco contra el zar, preso en Siberia, hombre en fuga a través de Alaska, Japón y China, explorador del Pacífico y, tras llegar a la Francia de Luis XV, colonizador francés y rey de Madagascar. Plasmó sus andanzas, que no acabaron ahí e incluyeron la amistad con Franklin y la participación en la revolución americana, en unas memorias que sus coetáneos convirtieron en best-seller y que han inspirados unos cuantos escritos. El que ahora se presenta ha salido de la pluma del "goncourt" Rufin.
