María Zaragoza es la mejor guía posible para entrar en "La biblioteca de fuego". Es la historia de iniciación de Tina, "una chica que siempre ha querido ser bibliotecaria y que apenas sabe nada de la vida, porque pertenece a una familia bien de provincias y siempre ha estudiado en casa sin apenas contacto con gente de su edad. Al llegar a Madrid para estudiar, tiene dieciocho años y la cabeza llena de pájaros; es 1930 y la ciudad bulle: los cafés, las tertulias, los movimientos políticos y feministas, los cabarés... Allí conoce a Veva, la que será su mejor amiga, y juntas entran en contacto con la Biblioteca Invisible, una antigua sociedad secreta que, a lo largo de la historia, se ha dedicado a salvar los libros que alguna vez han sido prohibidos o censurados, para que las generaciones futuras puedan disfrutarlos. En esta sociedad hay personas como Federico García Lorca, del que tienen que rescatar una obra de teatro censurada".
En todo este tiempo, prosigue la autora, "Tina vive en la pensión de su tía Paca lo que hará que se encuentre de frente al mundo de los fantasmas y la adivinación pero, y más importante, al que será el amor de su vida. Carlos, un chico pobre que vive allí gratis a cambio de hacer chapuzas y que estudia para médico, comunista republicano y orgulloso. Un hombre que tiene la sensibilidad necesaria para enseñar a leer y escribir a la criada de la tía Paca, Angustias". Mientras tanto, "llega la Segunda República y con ella la sensación de que España va a cambiar: se modernizan las bibliotecas y se permite el acceso al pueblo a los conocimientos a través de ellas y de las campañas de alfabetización, se aprueba el divorcio, la mujer puede por fin votar... Pero al mismo tiempo los aires de golpe militar soplan con fuerza. En 1936, ese golpe ya anunciado fracasa, lo que desata la Guerra Civil. Para entonces, Tina ya trabaja en la Biblioteca Nacional, y participa de los trabajos de salvamento del Tesoro Artístico y Bibliográfico español. Hay que salvar el arte y los libros de las bombas, del odio, de la desesperanza y de las bombas".
Conocerá así a personajes reales que fueron borrados de la historia, como Blanca Chacel que salvó el archivo con las fichas de lo que había en las cajas de ese salvamento; o Luisa Cuesta, que mantuvo la humanidad en tiempos inhumanos y escondió a un compañero sacerdote cuando sintió peligrar su vida; o el llamado ‘Ángel de los libros’, que se metía en las trincheras del frente universitario a rescatar los libros que los milicianos usaban como material de construcción que parase las balas y cambiarlos por sacos terreros. Todas estas personas participarán también del rescate de los fondos de la Biblioteca Invisible antes de que los estragos de la posguerra y los saqueadores terminen de destruirla. Pero para poder rescatarlos, será necesario encontrar su ubicación, cuya clave inesperada será la historia de amor de Tina y Carlos".
La biblioteca de fuego
María Zaragoza
Planeta, 528 páginas, 21,90 euros