Mieres del Camino,

Pablo ANTUÑA

En 1988, una iniciativa de un grupo de persona vinculadas a la minería, por medio del SOMA UGT, decidió apostar por un proyecto: llevar la natación a Mieres. De esta manera aprovecharon unos terrenos de los que eran propietarios para crear la primera piscina climatizada de Asturias y apostar por un club deportivo: el Manuel Llaneza. Y aunque cuenta en la actualidad con varias modalidades deportivas, la natación siempre ha ocupado un lugar preferente. Año tras año la cantera de este conjunto mierense ha ido progresando hasta límites insospechables para afrontar una temporada muy ilusionante.

El club trabaja día a día con sus 73 nadadores para seguir creciendo como nadadores y convertir al club en un referente a nivel regional. «Nuestro objetivo es enseñar con una edad muy temprana (entre 4 y 6 años) las técnicas de la natación de forma muy correcta», explica José Luis Vitos, director técnico del Manuel Llaneza.

Y es que a su juicio la competitividad no es el único punto que se exige durante la etapa de formación: «Tenemos fama de exigir mucho cuando aún son pequeños. Contamos con otro tipo de enseñanzas que están más encaminadas al juego y disfrute de la natación, por lo que el aprendizaje de la técnica es más tardío. Lo importante es que todas las técnicas básicas se sepan lo mas rápido posible», explica Vitos. Una idea que apoya con un ejemplo concreto. «Esto es así porque nuestra intención en las escuelas de natación y en los equipos es el desarrollo de la competición. Se trata de demostrarlo mediante el examen que supone enfrentarse a otros equipos si realmente lo que enseñamos es correcto», añade.

El Manuel Llaneza realiza un trabajado adaptado a las capacidades de cualquiera de sus miembros. «Intentamos que aquellos que realmente quieran entrenar duro lo consigan entre nuestras paredes, unas temporadas se consiguen éxitos muy importantes y otras menos, pero la filosofía principal es por encima de todo, planificar la temporada para mejorar en cada competición», comenta Vitos. Y es que la superación personal se antoja como una de las metas. «Intentamos que consigan mejorar las marcas personales de los nadadores», señala. Un hecho que les permite indirectamente seguir creciendo como club. «Buscamos estar entre los mejores de Asturias para intentar tener representación en los Campeonatos de España y no bajar la exigencia en numero de días y horas semanales de entrenamientos por miedo a perder nadadores», explica.