Avilés, I. URÍA

El Avilés visita esta tarde Los Tarronales con el objetivo de repetir los buenos resultados que cosechó la pasada temporada en sus enfrentamientos con los pixuetos. El equipo de Pole presentará una cara diferente a la de los últimos partidos a causa de las numerosas bajas, casi todas ellas en defensa. Blas García, por su parte, deberá lidiar con las ausencias de Adrián y Diego, dos importante piezas.

Los blanquiazules sumaron la pasada jornada la primera victoria liguera, aunque fracasaron en su intento de despejar las dudas sobre su juego. Ante un contrincante en teoría menor como el Tapia, los avilesinos sufrieron para amarrar los puntos, y el Cudillero no parece el rival más propicio para acabar con las incógnitas. Tras un mal inicio frente al Universidad, el conjunto que entrena Blas encadenó dos esperanzadores triunfos ante Ribadesella y Sporting B.

Pole, poco amigo de las revoluciones en la alineación, está obligado a buscar soluciones a la baja de Valero, a la que podría unírsele la de Rubo si el canterano se resiente del golpe que arrastra. Fer, Millán, Oli y Tino se quedaron fuera de la convocatoria por lesión, y Bastida, por decisión técnica.

Es probable que Dani Gala y Ramón formen pareja en el centro de la defensa, como ya han hecho en anteriores ocasiones de manera provisional. Goyo y Pablo López, que vuelve tras cumplir un partido de sanción, ocuparían los laterales. En el centro de campo la plaga de lesiones puede forzar el regreso anticipado de Mimi, que sólo ha jugado unos minutos en lo que va de campeonato, al sufrir una infección en el pie, primero, y en el oído posteriormente. Rubén Menéndez, Diego y Juan Val completarían el rombo en el centro del campo, y para el ataque los únicos efectivos disponibles son Radamés y Héctor, ante la ausencia de Sorribas por problemas físicos. Rada fue el autor del gol que el año pasado significó la victoria de los blanquiazules en Los Tarronales.

A pesar de sus bajas, el Avilés tiene intención de marcar cuanto antes para jugar con tranquilidad en el campo de los pixuetos, propicio para las acciones de estrategia.