Gijón, J. J.

El Grupo Sigarci recibe a las 18 horas al Forcusa Huesca en un partido más de la lenta agonía que está sufriendo el conjunto gijonés en la División de Honor B. Aunque matemáticamente no certificaría su descenso una derrota ante los oscenses, unida a una victoria del Lacera Naranco en la cancha del Toledo, dejaría a los grupistas a tan sólo un punto del descenso. Un punto porque quedarían ocho por jugarse y los dos clubes asturianos estarían separados por el mismo número, pero el «goal-average» particular es favorable al Grupo Sigarci, que ganó en Gijón y empató en Oviedo.

Los gijoneses afrontan este partido con la duda de Chema Cid, que arrastra problemas físicos y la necesidad de puntuar para que las jornadas que quedan tengan algún aliciente. Por su parte, el Forcusa Huesca llega a Gijón sin presión, pues tendría que perder todos los partidos, y el Grupo ganarlos todos, para verse inmiscuido en las combinaciones de descenso. Su plantilla, como la grupista, está cargada de extranjeros y también cuenta con Sergio Cid, hermano de Chema y jugador del Grupo en temporadas anteriores.