Santander, Efe

Racing de Santander y Real Madrid miden en El Sardinero dos sueños: el histórico de acceder a la Liga de Campeones de la próxima temporada para los cántabros, y la cercanía de repetir dos títulos ligueros de forma consecutiva para los madridistas.

El Racing recibe al Real Madrid con el objetivo de sumar puntos con los que mantener intactas sus opciones de clasificarse para la Liga de Campeones y al tiempo consolidar su posición entre los equipos que ocupan puestos europeos.

Los cántabros afrontan la visita del líder con la moral muy alta después de haberse impuesto el pasado sábado al Valencia en Mestalla (1-2) y situarse a un sólo punto del Atlético de Madrid, que cierra el grupo de los equipos que ahora ocupan puesto de Champions.

Además, esa victoria dio tranquilidad a los verdiblancos porque con ella tienen un colchón de ocho puntos para defender su actual puesto de UEFA.

Si la visita del Real Madrid a El Sardinero siempre ha tenido mucho gancho en Santander, ahora nadie quiere perderse este partido en el que los blancos llegan a Cantabria dispuestos a mantener o reforzar su liderazgo, ante un Racing que sabe a lo que juega, lo hace bien y en modo alguno salta al campo como comparsa.

El Real Madrid llega a Santander con la seguridad de haber dado un zarpazo a la Liga, pero evitando relajaciones. De antemano, tanto Raúl como Schuster han avisado que para ser campeones les sirve un empate en uno de los encuentros más complicados de los seis que le restan hasta el final de campaña.

La baja de Guti trastoca el dibujo de Schuster. Se verá en Santander un Real Madrid más defensivo, ya que el hueco del segundo capitán lo ocupará Diarra. Y la principal duda del técnico es dar continuidad a Robinho y Robben en los extremos o sentar al holandés, que durante la semana ha arrastrado problemas musculares. Si es así, Saviola recibirá la oportunidad que tanto tiempo lleva esperando.