Oviedo, Agencias

Tres días después de ser humillado en las semifinales de la Copa de la UEFA por el Zenit ruso, el Bayern de Munich se coronaba campeón alemán por vigesimoprimera vez gracias a un empate a domicilio sin goles ante el Wolfsburgo, que lo hace inalcanzable a falta de tres jornadas para que termine la Bundesliga, pues cuenta con 10 puntos de ventaja sobre su más cercano perseguidor, el Werder Bremen.

El Bayern, que también ganó este año la Copa germana, no dio lugar al suspense, dominando la Bundesliga desde el comienzo y sin abandonar nunca el liderato, en el último año de Ottmar Hitzfeld en el banquillo bávaro.

Tras el fracaso vivido la pasada campaña, cuando el Bayern no se clasificaba por vez primera en su historia para la Liga de Campeones, el club tiró la casa por la ventana con los fichajes -el francés Ribery, el italiano Toni y el alemán Klose-, y el tiempo le ha dado la razón.

Con los nuevos fichajes, y con el regreso de Hitzfeld al banquillo, muchos que ya llevaban tiempo en el club se crecieron. El caso más notable ha sido el del defensa argentino Demichelis, que ha formado una pareja de centrales con el brasileño Lucio de total garantía: el Bayern sólo ha encajado 18 goles en 31 partidos.

Si ante esa cifra alguien tendiese a creer que el Bayern ha sido un equipo concentrado en la defensa, ahí están los 59 goles marcados, 21 de ellos por Toni.

Hitzfeld, así, deja al Bayern recuperado en lo doméstico, aunque con el lunar de su eliminación en la UEFA -eliminación que ya pudo llegar antes, a manos del Getafe-. Su destino será la selección suiza y su sustituto será Jürgen Klinsmann, de quien muchos dudan si soportará la presión que siempre cae sobre el banquillo bávaro.

El Bayern sentenció ayer la Bundesliga, y el Inter no pudo hacer lo propio en Italia, ya que cayó en el derbi local ante el Milan (2-1). No sólo eso, sino que además ve acercarse al Roma, que tras ganar 0-3 al Sampdoria queda a tres puntos, con dos jornadas por disputarse.

Filippo Inzaghi y Kaká, en los minutos 51 y 56, pusieron por delante al Milan, siendo el argentino Julio Cruz quien acortaba distancias para el Inter en el 76.

El Milan consiguió así su triple objetivo: ganar el derbi, aplazar el triunfo en el Campeonato de sus históricos adversarios y, sobre todo, conseguir la cuarta plaza gracias a la derrota del Fiorentina en terreno del Cagliari (2-1).

El Roma, que nunca ha dado por perdido el Campeonato, cumplió imponiéndose por un contundente 3-0 al Sampdoria. Los goles de Panucci, el chileno Pizarro y el brasileño Cicinho (minutos 75, 79 y 85) permiten al equipo de la capital seguir soñando con arrebatarle el Scudetto al Inter en la última jornada.

En la Premier, el Manchester United dio un paso más hacia el título al tras golear por 4-1 al West Ham United, con dos tantos de Ronaldo (cuarenta ya en la temporada con el United en todas las competiciones), uno de Tévez y otro de Carrick. Los de sir Alex Ferguson quedan con tres puntos de ventaja sobre el Chelsea, que cierra hoy la jornada visitando al Newcastle United.

Aunque el Chelsea gane hoy el Manchester mantendrá el liderato gracias a su mayor diferencia de goles, y será campeón ganando la última jornada a un Wigan con todo solucionado.

Arsenal y Liverpool superaban ayer por sendos 1-0 sus compromisos ante Everton y Manchester City, respectivamente. Fernando Torres fue el autor del único gol de los «reds», su vigesimosegundo tanto en la Premier.