Mieres / Langreo,

H. NÚÑEZ / FUEYO II

El Caudal Deportivo dio el pasado domingo un golpe de efecto para sellar su pase a la liguilla de ascenso. Los mierenses vencieron sobre la bocina al Ribadesella por 2-3 en Oreyana y dan un vuelco a sus aspiraciones de jugar la liguilla de ascenso que se puede confirmar la próxima jornada si vencen en Mieres al Sporting B. Ahora mismo los blanquinegros dependen de sí mismos para lograr el pase, pues si vencen a los gijoneses les arrebatarían su plaza de liguilla.

Quien sigue firme es el desgastado Unión Popular de Langreo, quien pese los numerosos problemas físicos venció por 2-0 al Astur en el Nuevo Ganzábal y sigue en la cuarta plaza.

Por su parte, el Deportivo Tuilla fue el gran perjudicado de la jornada, pues nada pudo hacer ante la superioridad del Real Oviedo y cayó por 6-0 en su histórica visita al Carlos Tartiere. Esta derrota deja a tres puntos a los de César Suárez de las plazas de «play-off» de ascenso.

El equipo mierense ha sido uno de los protagonistas de la jornada al sumar una victoria de prestigio ante uno de los conjuntos más en forma de la categoría. El Ribadesella acumulaba una racha de tres victorias seguidas y seis semanas sin perder. Los de José Manuel se hicieron con el triunfo tras remontar en el descuento un 1-2 adverso que les ha dado un triunfo vital para sus aspiraciones de disputar la liguilla de ascenso y que hace que dependan de sí mismos para cumplir con su objetivo.

«El equipo no se entregó nunca, siempre confió en poder ganar pese a ir perdiendo y eso demuestra las ganas de vencer que tiene la plantilla», destacó José Manuel, quien resalta el valor psicológico de este triunfo sobre el tiempo al recalcar que «el plantel hizo una demostración de querer y confiar en poder lograr nuestro objetivo de clasificarnos para la liguilla de ascenso».

El técnico leonés de los caudalistas avanzó que «ya sabíamos que si ganábamos al Ribadesella íbamos a depender de nosotros mismos para jugar la promoción y con esa mentalidad salimos al campo, aunque tras adelantarnos en el marcador cometimos dos errores defensivos que propiciaron la reacción riosellana aunque posteriormente volvimos a ser mejores e, incluso, debimos remontar mucho antes del descuento».

Si en el Caudal pasan por un momento psicológico positivo tras un triunfo agónico en el Langreo más todavía. El cuadro que entrena Paco Fernández sumó en el Nuevo Ganzábal su quinta victoria consecutiva y sigue metido en puestos de «play-off». El gran valor de los azulgranas radica en que esta racha positiva llega cuando apenas tienen gasolina, pues varios jugadores arrastran molestias y juegan forzando la máquina.

«La Liga se nos está haciendo muy larga por todos los problemas que arrastramos, pero ganando se lleva mucho mejor y el equipo está dando la cara pese a todo lo que es para resaltar», afirmó el entrenador langreano, quien desveló que «ante el Astur hicimos muchas ocasiones para sentenciar, pero no lo hicimos y el 1-0 te hace estar algo intranquilo, pues los ovetenses cuentan con jugadores jóvenes con calidad, pero al final anotamos el segundo tanto y nos relajamos».

La peor parte se la llevó un Deportivo Tuilla que se aleja de la liguilla tras caer en el Carlos Tartiere ante un Oviedo que ahora se muestra intratable. Pese a este resultado los de César Suárez siguen en la lucha y el domingo reciben al Universidad.