Madrid, Europa Press

El presidente del Real Madrid, Ramón Calderón, aseguró ayer que en la entidad no se desea romper la armonía que se ha logrado esta campaña: «Hemos conseguido una unión tal que no querría romperla». Por eso, destaca que «los fichajes tienen que ser pocos, pero buenos y asumidos por todos como que aumentarán la calidad y competitividad».

«Este equipo necesita algunas gotas de calidad para añadir, pero sin romper lo que tenemos. Vamos a tratar de dar una alegría grande a los aficionados para que se sientan más ilusionados de lo que están», confió el presidente.

Sin dar nombres, aseguró que además de «calidad» en los fichajes se mira el «comportamiento, la actitud, la vida familiar...». «Es clave, no va a venir ningún jugador que no tenga el compromiso de los actuales. Una persona que no es ordenada en su conducta no vendrá. El triunfo es efímero y hay que cuidar bien este grupo», expresó.

Calderón, que realizó un balance de la temporada, se congratuló tanto del título como del espectáculo mostrado el miércoles ante el Barcelona, reconociendo que le «entusiasmó ver la comunión de equipo y público» y «ver que esto es un espectáculo, porque no es cierto que lo importante sea ganar, la gente quiere ir a divertirse, a sentir la emoción».

El presidente, que «no recordaba al público así», defendió una vez más a su homólogo azulgrana, Joan Laporta, lamentando la «injusta» situación que vive y desvelando que el presidente le elogió por haber sido «valiente tomando decisiones» necesarias.

Calderón defendió, una vez más, tanto a su técnico como al capitán, con el que tiene «una apuesta de que va a marcar 20». «Está viendo algo distinto, entrega, casta, compromiso, orden...», señaló sobre la continua alegría que refleja el rostro del «7». «En otra época se sintió ninguneado y yo quise ofrecerle los galones de verdad, creía que era lo que había que hacer. Cuando llegaron los llamados galácticos, él pasó a un segundo plano y fue una injusticia y una insensatez. Sin gente como él los jóvenes que llegan no reciben el testigo; todos le admiran y le miran como referente», elogió.

Calderón, que sabe que la «asignatura pendiente» es la Champions, donde el club debe «llegar por lo menos a semifinales», asegura que nunca tuvo «ninguna duda» sobre Schuster, ni en los peores momentos. «Siempre hay altibajos, pero habíamos ganado en los campos más importantes, como San Mamés, Calderón, Camp Nou y Mestalla, además de Villarreal, y no podía haber sido casualidad».