Avilés, Juan C. GALÁN

El Avilés busca fuera lo que no tiene en casa. La junta directiva ha diseñado una estrategia inédita hasta la fecha para preparar la próxima temporada: lanzar el anzuelo a jugadores asturianos que militan en clubes de otras comunidades y a los que les pique el gusanillo de la morriña. El Avilés pica alto. La mayoría de jugadores asturianos en la diáspora juegan en Segunda B, por lo que su contratación se intuye costosa. Sim embargo, y como excepción que confirma la regla, parece que el primer equipo será la prioridad del club para la próxima campaña. Sin escatimar esfuerzos.

El director deportivo del Real Avilés Industrial, Ulpiano Cervero, intentaba justificar ayer esa «operación retorno» que se propone el club: «En la Tercera asturiana no hay jugadores de banda ni delanteros que mejoren lo que tiene el Avilés. Los mejores jugadores asturianos en estas posiciones están fuera de la región y vamos a intentar recuperar a alguno de ellos», comenta Cervero. El máximo responsable deportivo, además, tacha de «ramplones» a la mayoría de jugadores asturianos de banda y delantera. «En esas demarcaciones hay un jugador que destaca sobre el resto y, por detrás de él, no hay nada. La temporada pasada intentamos fichar a los dos mejores extremos de Tercera, Dubo y Rubén Fernández y, como no pudimos, rehusamos ir a por el segundo en la lista porque no mejoraba lo que había en el Avilés», comenta Cervero. A tenor de las palabras del director deportivo, el Avilés no buscará refuerzos en el mercado regional, al menos en lo que se refiere a las posiciones de vanguardia. No así en las de la zaga, pues el central Boli, que aún pertenece al Cudillero, es el primer fichaje del Avilés para la próxima campaña.

El Avilés espera que la presencia de Roberto Robles en el banquillo sea un imán para jugadores que que militan en clubes de fuera de la región.

La experiencia del berciano, que ha tenido a su cargo a multitud de jugadores en sus 30 años de trayectoria, es una baza que el club pretende jugar para alcanzar su objetivo.

Hasta el momento, la dirección deportiva del Avilés impone la ley del silencio en cuanto a la identidad de los jugadores que pretende recuperar para el fútbol asturiano. Sin embargo, tres nombres comienzan a sonar como «futuribles»: el del delantero centro gijonés Alejandro, el extremo zurdo Jorge Valiente y el lateral izquierdo avilesino Sergio Labrado. El ariete, que estuvo a las órdenes de Robles en el Marino, pretende abandonar el Palencia.