La Marmolada, Efe

El español Alberto Contador (Astana) se erigió en nuevo líder del Giro de Italia al término de la decimoquinta etapa, con final en el alto de La Marmolada, en la que el italiano Emanuele Sella (Navigare) logró en solitario su segundo triunfo consecutivo.

La general queda con Contador al frente seguido de los italianos Riccó (a 33 segundos), Di Luca (55) y Bruseghin (1:18); mientras que el último ganador de la Vuelta a España, el ruso Desni Menchov, se retrasa 1:20 minutos.

Contador pasa así a un primer plano, pues aunque sin estar en su mejor momento -estaba de vacaciones en la playa cuando el equipo le reclamó para participar en el Giro- dejó claro que con las dificultades se crece y más si la carretera mira hacia arriba. No lo pasó nada bien camino de La Marmolada, pues además de los numerosos tirones de los aspirantes al podio final el tiempo no acompañó debido al frío y la lluvia y algún que otro problema con su bicicleta en el tramo final de la carrera.

El español sacó a relucir su clase y supo esconder los problemas para presentar su carta como candidato al triunfo final, algo que hasta el momento sólo ha conseguido un español: el navarro Miguel Indurain en las ediciones de 1992 y 1993.

En el grupo de favoritos nadie se movió hasta los cinco últimos kilómetros, cuando Riccó decidió probar las fuerzas de Contador. Por momentos Riccó dio la sensación de que iba a lograr su objetivo, pero a medida que se acercaba la meta acusaba su osadía y Contador iba recuperando ritmo y tuvo un final explosivo para lograr el objetivo, que no era otro que ser el primero en la general.

Hoy se disputará la tercera jornada de alta montaña alpina, una cronoescalada de 12,9 kilómetros entre San Vigilio di Marebbe y el alto de Plan de Corones.