Oviedo, José PALACIO

El hermetismo en el Caravaca para el partido de mañana en el Carlos Tartiere es total. El club murciano guarda con celo hasta los más mínimos detalles y no quiere que ninguno de ellos trascienda públicamente. Prueba de ello es que emprendió el viaje ayer, un día antes de lo que había anunciado. La expedición paró a comer en Madrid y siguió viaje a León, donde el equipo se entrenó y pernoctó. Los planes para la jornada de hoy son una incógnita: el Caravaca teme una encerrona en el Tartiere y no quiere desvelarlos. Asegura que duda entre permanecer una noche más en León o trasladarse a Gijón, como se había apuntado en un principio. Ni los propios jugadores, entre ellos el asturiano Manu, sabían ayer, después de acabar el entrenamiento en la ciudad deportiva de la Cultural, dónde iban a alojarse.

Lo que sí es seguro es que varios directivos del equipo llegarán hoy y se alojarán en un hotel de Oviedo.

El Caravaca no estará solo en el Carlos Tartiere. Está confirmada la presencia de un autobús de aficionados que saldrá hoy desde la localidad murciana y hará noche en León. Los seguidores serán ubicados en una zona protegida del Carlos Tartiere.

El entrenador del Caravaca, Gabi Correa, desplaza a Oviedo a todos los jugadores disponibles. Las bajas son las mismas del partido de ida, Álvaro Luquín y Checa, mientras que es duda el delantero Petu. El posible once será: Giner, Dioni, Sanjosé, Gurtubay, Manu, Vilaseca, Josevi, Pelusa, Juanmi, Parche y Elías.