Histórico subcampeonato

Por primera vez desde la década de los 30 el Sporting afrontaba tres competiciones oficiales: Liga, UEFA y Copa del Rey. La plantilla se reforzó con dos argentinos: Óscar Ferrero, hermano de Enzo, y Ricardo Rezza, defensa central procedente de Huracán. Ambos venían a cubrir la baja de José Manuel, que pasó a desarrollar labores en la secretaría técnica. Una salida más polémica fue la del también argentino Mario Killer, que tras cumplir sus tres años de contrato, consideró que no le afectaba el derecho de retención y por lo tanto era libre para fichar por cualquier equipo. Algo a lo que se negó el Sporting, que terminó cobrando un traspaso al Betis, club por el que fichó. La transferencia cubrió una laguna legal de la Federación, que no contemplaba el derecho de retención de jugadores extranjeros, creando jurisprudencia. También se registró un caso insólito en la plantilla, al formar parte de ella tres parejas de hermanos: Los Castro, los Menéndez (Javi y Toni) y los Ferrero.

La escuadra rojiblanca confirmó la buena temporada realizada el año anterior y logró un subcampeonato histórico. El debut liguero fue prometedor, los gijoneses le endosaron un 4-1 al Atlético de Madrid en casa, con goles de Quini -en dos ocasiones-, Ferrero y Rezza. El Sporting practicaba un fútbol no tan vistoso como la temporada anterior, pero sí más efectivo, con Doria y Rezza infranqueables en el centro de la defensa. El club asturiano se alzó con el liderato de la clasificación al final de la primera vuelta, y entabló un dura pugna con el Real Madrid en pos del título. No corrió la misma suerte en Copa del Rey, donde fue superado por el Cádiz en primera ronda. La eliminación fue aún más dolorosa debido a que los gaditanos jugaban en Segunda división y el Sporting cayó derrotado en la tierras andaluzas por 1-0, y no pasó del empate a dos goles en casa.

En el mes de marzo se produjo la primera jornada de huelga convocada por la AFE (Asociación de futbolistas españoles), creada hacía un año en señal de protesta por el derecho de retención que tanta polémica provocó al inicio de la temporada. El Sporting tuvo un final de liga irregular. A ocho jornadas de la conclusión del campeonato afrontó un partido crucial ante el Real Madrid en su lucha por el título. Los gijoneses acusaron los nervios y cayeron por 0-1 en casa con gol de Santillana, en un partido en el que El Molinón despidió con una atronadora ovación a los merengues por el buen juego practicado. La jornada siguiente el Sporting volvió a caer derrotado ante el F.C. Barcelona por un rotundo 6-0 y se alejó del liderato. La reacción llegaría después y los rojiblancos lograron un histórico subcampeonato. Además, el equipo fue galardonado con el trofeo a la deportividad por segundo año consecutivo y con la Copa Stadium, como distinción por su fomento del deporte, que el Rey de España entregó al presidente Manuel Vega-Arango.

La primera gran noche de fútbol europeo que vivieron las gradas del Molinón fue un 13 de septiembre ante el Torino. Los italianos fueron los primeros en ronda eliminatoria de UEFA. La ida se jugó en Gijón, y a los cuatro minutos, un gol de córner directo de Ferrero adelantó a los locales. Las combinaciones del argentino con Morán hicieron estragos en la zaga azzurra y éste último anotó otros dos goles que dejaron la clasificación encarrilada y que hasta hoy, es la mayor goleada conseguida en la historia del club en un partido europeo. En la vuelta los de Turín se llevaron el triunfo por la mínima, 1-0, marcador que daba el pase a los de Miera. La gran actuación de los gijoneses en esta eliminatoria trajo como consecuencia la convocatoria para el combinado nacional, de siete de los que participantes en aquel encuentro: Uría, Morán, Joaquín, Quini, Maceda, David y Cundi. El Estrella Roja de Belgrado fue el siguiente emparejamiento. El Sporting perdió en Gijón 0-1, y no pudo remontar en la vuelta. Un gol de Ferrero en el pequeño Maracaná igualó la eliminatoria, pero en los minutos finales Petrovic empató, y aunque Doria pudo marcar el segundo de cabeza y llevar el partido a la prórroga, el Sporting terminó apeado de Europa en 1/16 de final. Una temporada para el recuerdo.