El piloto español Fernando Alonso (Renault) regresa la semana próxima "con recuerdos muy especiales" al circuito de Hungaroring, donde en 2003 obtuvo su primera victoria en un Gran Premio de Fórmula uno, y con la sensación de que el R29 "definitivamente ha mejorado".

"Las últimas actualizaciones nos han hecho mucho más competitivos. Es una pena que no pudiéramos (en el GP de Alemania) entrar en la Q3 porque salir en el puesto 12 significa que estás fuera de posición y no pudimos ofrecer el verdadero ritmo del coche en la primera mitad de la carrera", explicó Alonso.

"Cuando tuve un poco de espacio", añadió, "el coche iba muy rápido y pude hacer los mejores tiempos en 11 vueltas, de ahí que esté convencido de que tenemos potencial para estar en el podio. Es fácil decir lo que debiera haber pasado pero salir con dos puntos (terminó séptimo) fue un poco decepcionante", aseguró el doble campeón mundial.

Hungaroring suscita grandes recuerdos tanto a Fernando Alonso como al equipo Renault. "Los recuerdos de mi victoria en 2003 son muy especiales porque también fue la primera victoria de Renault desde su regreso a la Fórmula uno y el triunfo dio una gran motivación y confianza a todo el equipo".

"Siempre disfruto visitando Budapest porque es una ella ciudad, la gente es muy amable y suele haber un ambiente relajado en el paddock porque todo el mundo está pensando ya en las vacaciones de verano", comentó.

El circuito de Budapest "es uno de los más lentos de la temporada", apunta Alonso. "Estás casi siempre en una curva, de ahí que sea muy exigente tanto en el aspecto mental como en el físico, especialmente si hace calor. Se necesita mucha estabilidad delante, buena tracción y adherencia para salir bien de las curvas", dijo.

"Adelantar", prosiguió, "es muy difícil y la única oportunidad real está en la primera curva y al final de la recta principal, por eso es muy importante estar al máximo en la calificación para empezar la carrera dentro de los diez primeros". EFE