Gijón, Víctor RIVERA

La pregunta está en la mente de todos: ¿quién será el portero titular del Sporting? Habrá que esperar al 31 de agosto, en el Camp Nou, para responderla. Pero lo que sí es seguro es que la llegada de Juan Pablo ha aumentado el nivel de exigencia para Cuéllar y que el debate sobre el portero titular ya se ha abierto entre el sportinguismo. A priori, Iván Cuéllar, el titular de la plaza, parte con ventaja. El héroe del Zorrilla tiene a su favor el haberle dado muchos puntos al equipo en la temporada pasada. Sin embargo, Juan Pablo llega con el aval de ser una vieja pretensión de los técnicos rojiblancos, que consiguieron ficharlo este verano tras varios intentos frustrados.

El Tenerife se cruzó en la operación hace dos temporadas y se llevó al portero leonés que había despuntado en el Numancia. El pasado verano, el conjunto soriano lo repescó y volvió a ganarle la partida al Sporting. Al tercer intento, Juan Pablo recaló en Mareo.

La portería fue una de las líneas más criticadas en la temporada pasada, especialmente en el duro inicio de competición. Cuéllar llegó el verano como teórico portero titular, pero Sergio Sánchez aprovechó la pretemporada y una lesión del extremeño para revertir la situación. El Sporting empezó el año con cinco derrotas consecutivas ante los grandes de la Liga. Hubo goleadas escandalosas y los focos apuntaron injustamente hacia Sergio Sánchez.

Cuéllar irrumpió entonces en el equipo titular. El portero firmó grandes actuaciones y el Sporting comenzó a ganar. Hasta que llegó la gris, lluviosa y aciaga tarde de San Mamés en la que el Sporting fue goleado y Cuéllar se lesionó de gravedad en el tiempo de descuento.

Mientras la secretaría técnica sondeaba el mercado en busca de un portero de urgencia, hubo que recurrir a Sergio Sánchez. Esta vez el portero sí fue reconocido y se llevó los aplausos de El Molinón en el choque ante el Almería. Sergio Sánchez II, hoy olvidado en el filial, fue su suplente. Hasta que llegó Lafuente. El de Baracaldo mostró un nivel correcto, con una gran sobriedad. La recuperación de Cuéllar para el tramo final de la Liga resultó providencial, especialmente en el encuentro de Valladolid, donde el portero evitó la derrota con una actuación estelar. Aquel día el Sporting casi selló la permanencia.

Juan Pablo llega como una alternativa que ha sabido contentar a la grada. La portería parece que ha dejado de ser un problema y que el Sporting está en buenas manos.