Oviedo, E. C.

Al ovetense Mario Álvarez, vencedor de la última edición del concurso «Operación Triunfo», le hubiera gustado ser futbolista. Así lo declaró ayer, minutos antes de recibir el carné de socio de honor y el abono de esta temporada del Oviedo del manos del consejero Ataulfo Valdés.

Aunque acudió al Carlos Tartiere en numerosas ocasiones -él es de los que nunca abandonaron al Oviedo en Tercera-, ayer pisó por primera vez el césped, una sensación que, asegura, «es una pasada». Aunque confiesa que nunca ha sido «un virtuoso del balón», algo que muchos ponen en duda tras haberlo visto ayer dando toques a una pelota, sí que se declara un apasionado del fútbol. «Lo he echado mucho de menos durante los tres meses de la Academia», afirma, «y del ascenso del Oviedo me enteré hace poco menos de un mes, cuando acudí a firmar discos a Los Prados». Oviedista de corazón, aunque seguidor de todos los equipos asturianos, el cantante se mostró ayer muy agradecido por el reconocimiento que le ha hecho el club azul. «Se han portado genial conmigo» dijo Mario, quien aspira a poder actuar algún día en el Tartiere. «De momento, voy a actuar en San Mateo con mis compañeros de OT en la plaza de la Catedral, y ojalá pueda cantar aquí algún día». Hasta que se llegue ese momento, Mario se conforma con acudir, siempre que sus compromisos se lo permitan, a animar a los azules esta temporada.