Avilés, Albina FERNÁNDEZ

El Avilés vuelve hoy a los entrenamientos después del descanso del fin de año para preparar el partido de mañana ante el Luarca, que se disputará a partir de las 16:00 horas en el Suárez Puerta. El técnico, José Manuel Muñiz, cuenta con la baja segura de Lozano por lesión y es duda Dani Granda, que tuvo que abandonar el entrenamiento el pasado miércoles al notar molestias en el tendón rotuliano. La buena noticia es que Serrano se recuperó y volverá a la convocatoria después de varias semanas en el dique seco.

La plantilla despidió el año el miércoles en la Toba con pasteles y sidra, y confía en seguir en 2010 la buena racha de nueve partidos sin derrota que le colocó a las puertas de la liguilla de ascenso. Muñiz es optimista, pero advierte del peligro del antepenúltimo clasificado en la tabla. «El partido del Luarca es muy peligroso y tenemos que afrontarlo como si fuera el líder. En esta categoría todos los equipos pueden ganar en cualquier campo», precisó. El técnico señaló que el once de mañana será similar al de los últimos partidos, aunque adelantó que habrá cambios a partir de mediados de enero. «Enero y febrero son dos meses complicados porque afrontaremos el asalto al final de la liga. Por eso habrá rotaciones y reparto de minutos en las posiciones en las que podamos hacerlo. Si a finales de febrero tenemos opciones de estar arriba todos los futbolistas serán necesarios a su mejor nivel, y para lograr eso todos tienen que tener minutos», explicó.

Muñiz sigue sin hablar de objetivos. «Todo dependerá de donde estemos a finales de febrero, hasta entonces tenemos que seguir partido a partido, con tranquilidad y sin otra preocupación que jugar lo mejor posible», concluyó.