Gijón, J. E. CIMA
«Quiero un equipo muy dinámico, veloz en acciones y que ataque hasta cuando está defendiendo porque no me gusta esperar el fallo del rival». Esta es la filosofía que quiere implantar Javier Vidales, nuevo entrenador del Sporting B, que sustituye a Abelardo y que tomará hoy, a partir de las 11 horas, las riendas del filial rojiblanco hasta final de temporada aunque espera seguir unido muchos años al club gijonés. Ayer, en su chalé de Jove, ya estudiaba a fondo la plantilla rojiblanca ante el primer entrenamiento.
Javier Vidales (Astorga, 1965), se considera asturiano porque «mi padre es de Pravia y nací en León cuando él fue a trabajar». Se formó como futbolista en los filiales del Sporting pero lo abandonó pronto para dedicarse a entrenar. Llegó a técnico en la escuela de Mareo escalando por los distintos equipos hasta dirigir al Sporting B de 1997 a 1999 y también fue por momentos segundo de Antonio López en el primer equipo. Luego emigró para entrenar a la Gimnástica Segoviana (1999), Unión Popular de Langreo (2001), Lugo (2002), Pájara Playas (2003), Vecindario (2004), Las Palmas (2006) como secretario técnico y primer entrenador en 2008 para ser sustituido el 25 de mayo de 2009 por Castellano.
Vidales reconoce de su primera marcha del Sporting que «tuve la prisa del joven por ser entrenador, pero siempre dejé las puertas abiertas. Logré una gran experiencia en esos equipos de fuera. En el Pájara Playas me fichó Uría y a pesar de no cobrar 8 meses jugamos el «play-off». En el Vecindario montamos un bloque para ascender a Segunda A. Y por eso me llevaron de secretario técnico para Las Palmas, donde luego también fui entrenador».
Sabe que Abelardo «está pasando un mal momento y a mi me toca el bueno, pero a todos nos sucede. Espero hablar con él. Vi al Sporting B en cuatro partidos donde tuvo una primera parte muy buena y una segunda en contra por los malos resultados. Quiero poner primero el termómetro en el vestuario para ver como están y luego actuar. Los resultados pueden llegar ya en la primera semana como me pasó en Las Palmas, pero la identidad del juego tarda más tiempo. Pienso que hay buenos jugadores». De su época anterior en el Sporting B recuerda que «jugamos con juveniles como Rubén, Yago, Samuel, Gerardo, Pablo Alvarez y luego también fueron traspasados Sergio Sánchez, Pablo Amo y Manolo. Subimos ocho al primer equipo».
