josé manuel colmenero crespo Ex futbolista de Primera División y del Marino

Avilés, Albina FERNÁNDEZ

José Manuel Colmenero Crespo, José Manuel, se retira del fútbol por una inoportuna lesión que le impide cumplir su ilusión de subir con el Marino de Luanco a Segunda B. El jugador gijonés ya forma parte de la historia del fútbol asturiano tanto por su dilatada trayectoria como por los títulos logrados. Cuenta en su palmarés con un Campeonato de Liga (1999-2000), una Copa del Rey (2002) y dos supercopas de España (2000 y 2002), todo conseguido en el recordado «Súper Dépor». Y es precisamente su estancia en La Coruña uno de los mejores recuerdos que guarda de su experiencia en el fútbol.

José Manuel nació en Gijón hace 36 años. Empezó a jugar en El Llano 2000 en la banda derecha y estuvo más de una década en Mareo. Subió al Sporting en la temporada 2003 y ahí empezó una intensa carrera que le llevó a jugar al máximo nivel en el Mallorca, de nuevo Sporting, Deportivo de La Coruña, Numancia, Deportivo otra vez y Hannover (Alemania). En la temporada 2003-04 volvió a España e inició en el Polideportivo Ejido un periplo por equipos de Segunda y Segunda B que continuó en el Elche, Pontevedra, Marbella, Roquetas y Marino, al que llegó a principios de esta temporada.

En Luanco jugó tres partidos de titular en la Copa Federación y seis en Liga, donde logró un gol ante el Llanes en el 2-1 de Miramar. Su último partido fue en Oviedo, ante el Astur, el 8 de noviembre de 2009. La rotura de un pequeño hueso del tobillo derecho le jugó una mala pasada, pese a que en un principio nadie le dio importancia. Los meses pasaron y no mejoraba, así que acordó con el club dejar el equipo para que pudiera entrar Sergio Villanueva.

-¿No había otra solución más que la retirada?

-Yo creo que no porque los meses pasaban y ni mejoraba ni parecía que lo iba a hacer. Pienso que fue lo mejor. Había que mirar por los intereses del Marino, que tenía que reforzarse porque estaba muy justo de gente. Es una lástima porque firmé con muchas ganas, pero las cosas son así.

-¿Es un adiós definitivo?

-Pienso que sí. Creo que no voy a volver a jugar porque con 36 años me vino muy mal esta lesión. Y al darme de baja en el Marino es complicado volver, aunque también es verdad que nunca se sabe. Lo que quiero ahora es curarme bien para hacer una vida normal.

-¿Es difícil hacerse a la idea después de tantos años?

-Sí, cuesta asimilarlo pero es normal. Algún día tenía que ser, pero es una pena que sea por una lesión cuando tenía tanta ilusión por subir con el Marino. En todo caso hay que asimilarlo. Les pasó a otros compañeros y ahora me toca a mí.

-¿Se ve como entrenador?

-En principio no me lo planteo porque no me gusta, pero algo se hará con algún amigo. Aún no tengo pensado nada porque lo único que quiero es recuperarme. Luego ya se verá lo que se hace.

-¿Seguirá viendo fútbol?

-Sí, sí. Voy a ver al Marino como un aficionado más porque es un equipo que me gusta y siempre le voy a seguir. Ya me había enfrentado a ellos en la Copa del Rey con el Dépor y es en club en el que todo se hace como en familia, algo muy importante para que salgan bien las cosas. Se merece lo mejor. Creo que va a quedar campeón de Liga porque tiene una plantilla muy buena, luego ya se verá hasta dónde puede llegar, pero yo creo que va a subir, lo dije desde el principio y con el tiempo lo está demostrando.

-¿Qué equipo ha sido más determinante en su carrera?

-El Sporting. Estuve once años allí y me dio la oportunidad de ir al Deportivo de La Coruña, donde pasé un tiempo excepcional.

-¿Seguirán los rojiblancos un año más en Primera División?

-Sí, claro. Yo lo veo bien. Tiene una buena plantilla y lo mejor es que están haciendo bien las cosas y cada año está mejor. Esta temporada se salvará sin problemas.

-¿Algún recuerdo especial de su carrera?

-Hay muchos y muy buenos, pero nunca olvidaré el conocido como «Centenariazo», es decir, la Copa del Rey que le ganamos al Real Madrid en el Bernabeu el año que celebraban los blancos el centenario. Aún me emociono cuando lo recuerdo.

-¿Qué jugador de su equipo le impresionó más en su carrera?

-Hay varios, pero me quedo con Juan Carlos Valerón. El año del título de Liga y, en general, antes de la lesión estuvo impresionante.

-¿Y entre los contrarios?

-Roberto Carlos, del Madrid, porque lo sufrí. Es un gran defensor, lo tenía en mi banda y era muy difícil de pasar. Fuera de eso creo que Zidane era lo máximo.

-¿En qué campo se encontró mejor jugando de local?

-El Molinón, siempre y sin duda. Para no olvidar.

-¿Y de los contrarios?

-El Santiago Bernabeu. Es un campo impresionante cuando está lleno. Lo miras desde abajo y te quedas perplejo. El Camp Nou también es bonito, pero no causa la misma impresión.