Oviedo, E. CASERO

<Miguel / Delantero del Oviedo>

«Con la afición que tiene, creo que nada podrá con este club». Así de tajante se mostró el delantero del Oviedo Miguel en el chat de LA NUEVA ESPAÑA sobre las consecuencias para el club azul en caso de que no se lograra el ascenso, algo que no supondría para él un fracaso: «Sería, más bien, una desilusión».

El ariete oviedista se prestó ayer a responder en el chat de lne.es a las preguntas de los lectores, quienes mayoritariamente se interesaron por el estado del equipo de cara a la fase de ascenso, cómo celebraría el delantero el gol del ascenso, los posibles rivales para los «play-off» y sobre la difícil temporada que ha atravesado Miguel. Muchos le pidieron perdón por no haber confiado en él durante la temporada. «No tengo nada que perdonar», respondió el ariete a uno de los seguidores que le pidieron disculpas por no haberle apoyado a su llegada al club: «Para mí la afición del Oviedo es impresionante y sé que en cuanto las cosas salgan bien me vais a apoyar todos», añadió.

Su salida al campo en los partidos de esta campaña, especialmente en los del Tartiere, ha estado acompañada de silbidos. El jugador dijo ayer en el chat de lne.es que aceptaba las críticas «de buen grado porque de ellas siempre se aprende, aunque los insultos son otra cosa». Miguel agradeció el apoyo de los que le aplaudían y aseguró que respetaba a aquellos que le silbaban.

Este año no ha sido fácil para Miguel. A principios de octubre se lesionó y tuvo que ser sometido a una intervención quirúrgica que le apartó casi tres meses de los terrenos de juego. Aunque ya está recuperado, el jugador reconoció a los internautas que la lesión le había condicionado mucho. «Llego fresco a la fase de ascenso y estoy seguro de que si no me hubiera lesionado mi rendimiento hubiera sido otro», dijo a un participante, mientras que a otros les reveló que su deseo es cumplir, si el club le deja, la temporada que le queda de contrato en el Oviedo, «e intentar sacarme la espina de este año».

A la pregunta de a qué rival prefiere en la primera ronda de la fase de ascenso comentó que no tenía preferencias, aunque no le gustaría que fuera uno con un campo de hierba artificial, ni el Ceuta, «más que nada por el desplazamiento que tendrían que hacer los aficionados», indicó.

Sobre Pichi Lucas, Miguel dijo que era un hombre con quien se puede dialogar y al que ve capacitado para dirigir al Oviedo si se asciende a Segunda. «Sería un buen entrenador en las dos categorías, ya lo ha demostrado», y sobre la plantilla comentó que todos confían en que se puede lograr el ascenso «y somos conscientes de lo que significaría». ¿El jugador con más clase?: «Manu Busto e Iván Ania, del equipo, y Zidane a nivel mundial».