Oviedo, E. C.

«La cabeza fría y el corazón ardiendo», les dijo ayer Toni Cuervo a los jugadores del Oviedo.

Cuervo, presidente de honor de la Asociación de Veteranos del club azul, acudió ayer por la mañana al entrenamiento del equipo, celebrado en El Requexón, acompañado de otros miembros de la asociación como su presidente, Vicente González- Villamil, Julio Marigil y Tensi, cuatro de los mejores defensas de la historia del club.

Durante 17 temporadas Toni Cuervo defendió la camiseta oviedista, «todas ellas de titular», apostilló Vicente, y ayer fue en encargado de transmitir a la primera plantilla oviedista todo el apoyo de los veteranos.

«Fue un acto muy emotivo», comentó González-Villamil, «y a Pichi Lucas le gustó mucho; les saludamos a todos uno por uno y hablamos del ascenso que pueden lograr este año, les dimos consejos y les dijimos que estuvieran tranquilos porque tienen todo lo que necesitan para sacar ésta y las otras dos eliminatorias adelante», añadió.

De los minutos que compartió con los jugadores, Vicente destacó la tranquilidad que le habían transmitido, «están muy responsabilizados y la verdad es que vi al equipo muy bien», apuntó.

El presidente de los veteranos cree que el partido de mañana entre el Oviedo y el Pontevedra «va a ser muy parejo, muy igualado, pero el jugar el segundo partido en casa nos da un plus de optimismo», dijo.

Para el ex central azul, el papel de la afición será fundamental para que la balanza se incline a favor del Oviedo, mucho más de lo que la gente piensa. «Quien no haya jugado al fútbol no puede hacerse a la idea de los importante que es que los aficionados estén animando durante todo el partido, se nota mucho y hace que los jugadores saquen fuerzas de donde no las hay», señaló. «En dos minutos se levanta o se pierde un partido, y en esto la afición es un factor muy importante».