Oviedo, Mario RODRIGO

Si el Tíjola se va a convertir en el rival del Oviedo en las eliminatorias para el ascenso, las noticias parecen buenas para el equipo asturiano. Por segunda vez en la temporada, el conjunto almeriense fue desarbolado por el Feve, aunque los locales no tienen nada que ver con el equipo de la primera vuelta. Aquel conjunto verbenero que tan pronto arrasaba con rachas de juego increíbles como se difuminaba en un visto y no visto se ha transformado en un equipo la mar de serio, fuerte atrás y capaz de manejar un partido con varios ritmos.

Ayer, de hecho, los jugadores entrenados por Alfredo Riera ni siquiera tuvieron que recurrir a su mejor juego. El Tíjola, cuyos componentes (casi todos) superan en caché a los del Oviedo, salió dormido y el equipo local le pasó por encima en todas las facetas del juego. A sabiendas de que los visitantes andaban huérfanos de uno de los mejores bases de la categoría, Fede Bavosi, Prieto aplicó una presión salvaje sobre Rufián que fue el principio de todos los males para los suyos.

Un juego de mucho sentido en ataque, liderado por un Tate que hasta estuvo generoso en muchas jugadas, y una férrea defensa llevaron el marcador hasta el 21-7 del primer cuarto, con el entrenador visitante desesperado.

La cosa no cambió demasiado en el segundo cuarto, donde el Feve puso la directa para sentenciar el choque. No es que los asturianos arrollaran al Tíjola en los terrenos técnicos y tácticos, sino que tampoco daban la talla en la pelea. El coraje de Agustín Prieto y de Tony Tate arrastró el marcador hasta la máxima ventaja del descanso (43-22, con un broche de lujo en forma de jugadón de Tate y triple de Rubén).

La segunda parte se desarrolló a beneficio de inventario. Los visitantes pusieron algo más de garra y estuvieron un pelín más acertados, pero el Feve no sufrió en ningún momento. El juego decayó y el público se resignó a entretenerse criticando las decisiones arbitrales en varios ratos de desconcierto de silbato.

Así las cosas, el Oviedo juega en la última jornada en la cancha del Knet Rioja, ya ascendido a la LEB Oro. Haga lo que haga, será octavo y su rival en las eliminatorias será el Andorra o el propio Tíjola.