El ciclista Carlos Sastre (Leganés, 1976) se retirará el sábado en el Criterium «Ciudad de Oviedo» (17 horas), tras 14 temporadas de profesional donde entre sus numerosos triunfos está ganar el Tour de Francia 2008 y etapas en el Giro, Vuelta y Tour durante las 26 participaciones en grandes carreras de las que acabó 25. El escalador abulense y cuñado de Jiménez, «El Chava», fue también gregario de lujo de campeones como Jalabert, Olano, Beloki, Hamilton o Basso.

-Acaba donde empezó con aquella Subida al Naranco en 1997, donde fue sexto.

-Estaba a prueba con la Once y la clásica se me hizo muy dura porque mi compañero Zülle fue todo el día escapado preparándose para el Mundial. Pero al final pude estar con los mejores de cara a meta. Luego al día siguiente fui con mi cuñado «El Chava» a ver cómo ascendía el desconocido Angliru que luego reclamó para la Vuelta a España. Me siento feliz de iniciar y finalizar en Asturias mi carrera.

-Se le ve agradecido.

-Estoy muy identificado con los asturianos y tengo grandes amigos. Esos recorridos por esa tierra me gustaban y fueron importantes en mi carrera como lagos de Covadonga, Naranco, Pajares, Angliru o La Farrapona. Doy gracias por este homenaje. Comenzar y finalizar mi carrera en Asturias marca mucho.

-Sin embargo no logró grandes victorias aquí.

-En la Vuelta a Asturias 2001 iba tercero y a pocos segundos del líder Domínguez cuando falleció nuestro masajista Carlos Iglesias y nos tuvimos que retirar. Iba a hacer algo grande porque estaba bien y faltaba la reina del Acebo. Luego en las Vueltas a España tuve momentos realmente bonitos y de protagonismo cuando hice podios.

-¿Qué balance hace de su larga carrera?

-Me siento a gusto con lo que hice y las experiencias que he vivido, aparte de los triunfos, y el trabajo para los compañeros. Me preparé y me entregué siempre a tope. Pero ahora es el momento de tomar otro rumbo. Me tomaré un descanso para atender a la familia. No quiero ser director porque sería llevar la misma vida de ciclista desde el coche y fuera de casa.

-¿Qué etapas fueron claves para ganar el Tour 2008?

-Alpe d'Huez, la contrarreloj y sobre todo Prato Nevoso. Pero una gran Vuelta se consigue estando atento todos los días porque se puede perder en una jornada.

-¿Qué le faltó por lograr?

-Sí que pienso que pude ganar algún Tour más y, por pedir, también otras carreras. Pero estoy contento de darlo todo y aprender de los fallos y éxitos. No me lamento.

-¿Qué ciclista le impresionó?

-Mi cuñado, al que conocí de cerca. «El Chava», por su forma de ser, actuar y de correr, era un ejemplo en todos los sentidos. Tenía mucha calidad, se conocía bien y lo explotó al máximo para ganar.

-Hábleme de los campeones de los que fue escudero de lujo.

-Jalabert fue uno de los más grandes del pelotón, con capacidad de superación para subir peldaños y ejemplo de profesionalidad. Olano soñaba con lograr grandes cosas, algunas las consiguió, pero por circunstancias le privaron de ser más grande. Beloki fue un corredor Tour que lo daba todo en Francia. Como Olano, por diversas causas, no terminó de cuajar grandes victorias.

-¿Y en el extranjero?

-Hamilton venía de estar con Armstrong y buscaba libertad como yo. No me transmitía demasiado y luego tomó decisiones que no esperaba. Basso es una gran persona y profesional que he admirado.

-Analice a sus técnicos.

-Cuatro me marcaron mucho. De mi padre aprendí las bases deportivas y la línea recta en la vida. Pascua me enseñó a entrenar y llegar en gran forma a los objetivos. Manolo Saiz me indicó cómo encontrar los límites en todos los extremos. Y con Riis aprendí mucho y logré los mayores triunfos.