Avilés, A. F.

David Morán tuvo una buena actuación en el derbi avilesino. El delantero del Navarro logró el gol que adelantó a su equipo, a punto estuvo de marcar el segundo y, junto con Barto, se batió el cobre ante la defensa blanquiazul. Y para que no faltara la épica, tuvo que retirarse del campo conmocionado, a falta de cuatro minutos, después de recibir un fuerte balonazo de Juan Díaz cuando formaba parte de la barrera en el saque de una falta.

El jugador sufre un esguince cervical leve y no podrá volver a entrenar al menos hasta el jueves. «Quedé noqueado y cuando intenté levantarme me mareé. Fue un golpe fuerte que me dio en el lateral de la cara y lo acusé. Por la noche me dolió bastante y aún tengo dolor cuando muevo el cuello, pero espero estar bien para el jueves», señaló.

El jugador gijonés del Navarro acabó descontento el derbi pese a su buena actuación. «Cuando el equipo pierde, lo demás no cuenta. Y esperábamos sacar algo, pero el gol de Sietes nos fastidió, aunque también hay que reconocer que tuvieron bastantes ocasiones». Y añadió: «Les tuvimos contra las cuerdas y casi se pudo ganar».

Morán marcó en el minuto 20 al rematar de cabeza una falta de Barto desde la derecha, y nueve más tarde tuvo otra ocasión muy similar a centro de Iván desde la izquierda, pero no acertó. «Estaba solo, pero el defensa saltó cuando yo y me despistó. Perdí de vista el balón y cuando me llegó no tuve tiempo de reaccionar. Fue una pena y la clave del partido, porque con el 0-2 a ellos les habría costado mucho más por los nervios», comentó.

El delantero dice que el equipo aún no puede estar tranquilo. «Tenemos que seguir luchando hasta que estemos salvados matemáticamente», concluyó.