En el momento más inoportuno, justo en los días previos de un partido que puede marcar la suerte del equipo, al Sporting se le ha encendido un nuevo fuego. Ya se sabía que el asunto de Nacho Novo no estaba cerrado, que la herida aún sangraba y que en cualquier momento explotaría. Al delantero gallego, de nuevo, le ha fallado el sentido de la oportunidad, lo mismo que le sucedió cuando anunció su deseo de irse del Sporting en la víspera del partido de Valencia. Nacho Novo hizo en la noche del martes un recorrido por varios medios de comunicación nacionales en los que respondió a Clemente, del que dijo que «va de gallito», y lanzó veladas insinuaciones sobre las gestión del club: «El día que la afición se entere de lo que pasa ahí, se va a armar la de San Quintín». Y vaya si se armó.
Las declaraciones del ex futbolista rojiblanco provocaron un enfado monumental de los gestores del club y, pasadas las dos de la tarde, el Sporting emitió un duro comunicado de respuesta en el que muestra «su más absoluta indignación y rechazo por las manifestaciones de Nacho Novo». El Sporting, además, «exige al ex futbolista rojiblanco que aclare públicamente sus falsas acusaciones contra la entidad». También se destaca que «el Real Sporting ha cumplido absolutamente todos sus compromisos con Nacho Novo -con una de las fichas más altas de la plantilla- y en un gesto de generosidad se le facilitó la salida, lo que el jugador no ha sabido agradecer».
El comunicado oficial del club va más allá y señala que «el Real Sporting no está dispuesto a tolerar la más mínima duda sobre la transparencia en la gestión de la entidad y se reserva las acciones oportunas si Nacho Novo reitera su actitud totalmente injustificable». El discurso institucional se endurece cuando explica que «el Sporting ha tratado siempre a Nacho Novo con el máximo afecto, a pesar de que su comportamiento profesional y personal en los últimos meses, sin entrar en más detalles, ha sido muy deficiente».
La realidad es que Nacho Novo nunca estuvo a gusto en el Sporting. Manuel Preciado, con el que ahora parece tener una relación extraordinaria, nunca situó al futbolista en su posición natural, lo que provocó los primeros enfados del jugador. Novo crítico abiertamente en privado a Preciado e hizo saber su malestar a quien sabía escucharle. Apenas unos meses después de su llegada al club, en enero de 2011 ya se comenzó a hablar de su posible marcha.
Su rendimiento nunca ha estado a la altura de las expectativas ni de sus elevados honorarios, bien es cierto que tampoco ha tenido la ocasión de jugar como delantero. Por eso, el Sporting siempre esperó la llegada de una oferta que interesara a todas las partes.
Curiosamente, fue tras la destitución de Preciado cuando los hechos se precipitaron. Tejada pidió mayor implicación al futbolista si quería hacerse un hueco en el equipo y Nacho Novo lo interpretó como una falta de confianza, por lo que pidió a sus agentes que le buscaran un destino. Polonia aún tenía abierto el plazo de fichajes y el Legia de Varsovia, tercer clasificado y equipo que disputa la Liga Europa, le hizo una oferta mareante por lo que queda de esta temporada y la próxima campaña.
Nacho Novo ya estaba fuera del club. Por eso, no sirvió de nada el intento de Clemente por convencerle para que se quedase. La negociación para su salida fue rápida y Novo cobró todo lo que correspondía, hasta el día trabajado. El acuerdo parecía bueno para todos, pero Novo se fue caliente y ahora ha incendiado al Sporting.
