La adversidad se ceba con el Sporting. Adrián Colunga será baja ante el Barcelona al serle detectada ayer una rotura fibrilar en el adductor del muslo derecho que le mantendrá apartado del equipo entre dos y tres semanas. Su ausencia podría ocuparla Formose Mendy, que se postula como uno de los firmes candidatos para actuar en el extremo izquierdo. Clemente incluso le probó en esta demarcación durante el entrenamiento de ayer, celebrado a puerta cerrada en El Molinón. «Si el entrenador decide que salga como titular, voy a ponerlo todo para conseguir algún punto. Poder enfrentarte al mejor equipo del mundo es el sueño que persigues desde niño», afirma el senegalés.

Una acción fortuita el pasado fin de semana en Santander se convirtió en el origen del peor pronóstico para Adrián Colunga. El ovetense sintió una pequeña molestia que atribuyó a una posible sobrecarga. Incluso se entrenó con normalidad hasta que el cuerpo médico le invitó ayer a hacer una resonancia magnética. El diagnóstico cayó como una losa sobre el futbolista, que confía en arañar días al plazo de recuperación y no descarta estar disponible ante el Granada.

La fatalidad de Adrián Colunga abre la puerta de la titularidad a Mendy. El senegalés se medía al Toledo en el Salto del Caballo hace dos semanas y apenas imaginaba que podría ser una de las novedades que presentará el Sporting en el Camp Nou. Ya en pretemporada dejó como carta de presentación en el primer equipo dos características que le hacen diferente: la velocidad y el desborde con las dos piernas. Una lesión durante la concentración organizada en Portugal terminó por devolverle al filial, conjunto con el que inició la temporada. Mendy ha sido uno de los protagonistas de la buena campaña del Sporting B y Javier Clemente lo ha tenido en cuenta. El vizcaíno le hizo debutar en Primera División la pasada jornada en El Sardinero.

El técnico rojiblanco caló pronto las carencias del equipo en los extremos. La necesidad de tener que adaptar a la banda a los numerosos mediapuntas con los que cuenta a sus órdenes le llevó a consultar alternativas con Abelardo. Le habían hablado de Mendy, jugador que acababa de ampliar su vinculación con el club por tres años más. El segundo entrenador rojiblanco no dudó en recomendárselo. «Me ha corregido constantemente desde el primer entrenamiento, tanto en los movimientos, como en el golpeo de balón», reconoce encantado el senegalés. Antes de conocer la lesión de Colunga, el técnico rojiblanco incluso valoró utilizarle en Barcelona en sustitución de Carmelo.

La polivalencia de este joven de 22 años, criado en la cantera del Olympique de Lyon, le permite actuar por las dos bandas, algo que también agrada a Javier Clemente. Se presta a ayudar al equipo en el puesto que sea necesario, aunque advierte que «me siento más cómodo en la izquierda, porque es en la que he actuado habitualmente en los últimos meses». Una opción que le viene como anillo al dedo a las necesidades del equipo.