El director de Comunicación del Sporting de Gijón, Manfredo Álvarez, ha garantizado hoy que el exentrenador del equipo Manolo Preciado "cobrará lo que se le debe".
Manfredo Álvarez ha reconocido que conoce de manera extraoficial, "pero no a través del juzgado", la presentación de una demanda por parte del exentrenador que reclama 1,3 millones de euros tras su despido.
La pasada semana los representantes legales del técnico cántabro y el club gijonés no alcanzaron un acuerdo en el acto de conciliación que tuvo lugar en la Unidad de Mediación Arbitraje y Conciliación (UMAC).
En ella, los responsables del Sporting ofrecieron pagar el dinero que le debe en varios plazos pero Preciado no aceptó la fórmula y presentó reclamación en el Juzgado de los Social número 2 de Gijón.
El Sporting tiene que hacer frente este año al pago de alrededor de cuatro millones de euros correspondiente al plazo pertinente pactado en el proceso concursal en el que está inmerso por lo que pretendía poder abonar la deuda con Preciado en varios plazos.
El Sporting tiene hasta el 30 de junio para proceder al pago del finiquito del entrenador si bien hay discrepancias sobre alguno de los apartados ya que Manolo Preciado también reclama la prima pactada por la permanencia en el caso de que esta se consiga mientras que el club sólo está dispuesto a abonar la parte proporcional según los puntos conseguidos por el técnico cántabro hasta su cese.
Las relaciones entre Preciado y el Sporting siempre han sido muy cordiales e incluso el propio técnico desveló que las negociaciones para su última renovación "duraron cinco minutos" por lo que los aficionados se muestran extrañados de la actitud tomada ahora por el técnico.
El portavoz del Sporting ve difícil que el juicio llegue a tener lugar ya que el plazo que marca la Liga de Fútbol Profesional para el pago de las deudas con jugadores y técnicos es hasta el 30 de junio y el impago conlleva el descenso automático de categoría y es poco probable que la vista tenga lugar antes de esa fecha.
Según Álvarez, "cada parte no hace más que defender sus derechos pero para que haya un acuerdo tiene que haber voluntad por ambas". EFE
