El español Fernando Alonso (Ferrari), dos veces campeón mundial, ha declarado hoy, a tres días de que comience en el Gran Premio de Australia el Mundial de Fórmula Uno, que es consciente de que "habrá que apretar los dientes en estas primeras carreras" del campeonato.

"Yo estoy deseando que llegue el fin de semana para correr la primera carrera. Este año he tenido menos tiempo para probar el coche, ya que la pretemporada se ha visto reducida a seis días, que no son suficientes para satisfacer mi deseo de pilotar", señala Alonso en el espacio de que dispone en la web de Ferrari.

"Ya lo he dicho varias veces: el nuestro es el único deporte en el que la preparación está prohibida. Es como si se le pide a (Rafa) Nadal probar una raqueta nueva durante seis días o a un futbolista que se entrene sólo seis días antes de jugar un Mundial", explica.

"Nos gustaría hacer más pruebas, pero no en detrimento de las carreras porque no hay nada mejor que la competición. De hecho, después de tantos kilómetros para probar y volver a probar, finalmente comenzamos a notar el olor. Hecho en falta la emoción de la sesión de clasificación, la excitación de estar en la parrilla de salida en espera de que se apague el semáforo, la adrenalina de entrar en primera curva, todo lo que hace excepcional la F1", comenta.

Alonso cree que "siempre es difícil sacar conclusiones de los test. Cada uno trabaja siguiendo su propio programa, por lo que no se puede hacer comparaciones reales (entre los equipos)".

"Seguramente aún debemos mejorar mucho, trabajar para conocer mejor el nuevo coche (F2012) y adaptarse lo antes posible al estilo de conducción que exige un coche más difícil de pilotar porque ha perdido carga aerodinámica en la parte trasera y usará unos nuevos compuesto de neumáticos", agrega el español.

"Sabemos en qué dirección debemos ir para desarrollar el coche, y esto es lo importante. Desde luego habrá que apretar los dientes en estas primeras carreras, pero antes debemos ver dónde estamos exactamente en cuanto a competitividad, y después dar el máximo para llevarnos a casa el mayor número de puntos posible de estas primeras carreras", afirma.

"Sé que los aficionados (de Ferrari) esperan oirnos decir siempre que estamos en disposición de alcanzar éste o aquél resultado, pero la verdad es que no podemos decir con certeza dónde estamos. Esperemos a las seis de la tarde del sábado, después de la sesión de clasificación, e incluso al final del primer ciclo de carreras fuera de Europa", confiesa al referirse a las pruebas de Australia, Malasia, China y Bahréin.

Fernando Alonso cree que hay que "permanecer fríos y tranquilos e ir paso a paso, empezando en Melbourne, donde ya habrá una primera idea". "Una vez sepamos dónde estamos, entonces podremos ponernos unos objetivos más definidos", añade.

"Lo realmente cierto es que con las ganas de ganar que nos caracteriza a cada uno de nosotros en Ferrari, y con la historia que tenemos a nuestra espaldas, notamos la responsabilidad de tener que hacerlo bien, por nosotros, por nuestro seguidores, por nuestros patrocinadores y porque ése es el deseo de todos. Debemos trabajar todos juntos para alcanzar nuestro objetivo", concluye.

Al comentar su viaje a Australia, Alonso explica: "Ayer por la noche llegamos a Melbourne. Es el viaje más largo del año y el primer objetivo es adaptarse lo más deprisa posible al horario. Hay diez horas de diferencia entre Oviedo y aquí".

Y destaca cuánto le gusta Melbourne. "Siempre me gusta venir a esta ciudad. El ambiente es muy particular; hay una sensación de relajación y tranquilidad que no es frecuente ver en otros sitios del mundo".

"Los australianos parecen tener una receta particular para vivir bien. También tienen sus problemas, no hay duda. Es difícil para nosotros juzgar sobre la base de una experiencia que dura sólo diez días al año, pero ésta es la impresión que tengo de ellos", dice. EFE