El dolor anímico no fue el único que acompañó al Oviedo desde Vecindario. Las lesiones de Owona y Rubiato preocupaban al cuerpo técnico, aunque las primeras exploraciones hacen ver el asunto con más optimismo. Owona sufre un esguince de grado uno en su tobillo, por lo que los servicios médicos no descartan que pueda estar disponible para el partido del sábado (20.30 contra el Sporting B en el Tartiere). La idea es que el miércoles o el jueves pueda trabajar con el resto de compañeros. Rubiato tiene más complicado llegar a tiempo. El delantero sufre una talalgia en una disputa y se mantiene pendiente de evolución.