Langreo, H. N.

Daniel Suárez por fin tendrá que hacer algún descarte. El entrenador del Unión Popular de Langreo pudo completar el entrenamiento de ayer en el Nuevo Ganzábal con la totalidad de sus jugadores. La incorporación de Adrián Llano a la sesión preparatoria ha dejado vacía la enfermería azulgrana.

A lo largo de los últimos meses las bajas han sido una de las tónicas del Langreo. Jugadores como San Eloy, David Kily, Otero, Nuño o Asenjo han pasado en algún momento por la enfermería, dejando a Daniel Suárez en muchas ocasiones con los justos para más de un encuentro.

Con el paso de las semanas se han ido incorporando a los entrenamientos y a los encuentros los lesionados. El último en salir de la enfermería ha sido Adrián Llano. El centrocampista sufrió una rotura fibrilar que lo ha alejado de los terrenos de juego algo más de un mes. El gijonés ya se incorporó ayer al trabajo con el grupo, aunque a menor ritmo. La reaparición del futbolista esta jornada sería algo precipitada y el cuerpo técnico podría esperar a la próxima semana.

Quien no podrá jugar el domingo ante el Real Oviedo B, a las cinco en el Nuevo Ganzábal, será el extremo Matías. El langreano deberá cumplir un encuentro de sanción ante los azules. El resto de jugadores estará a disposición de Daniel Suárez. La baja del extremo podría ser cubierta por Rubén Valdés, quien se encuentra en un gran momento de forma. Otro que también podría regresar al once sería Nuño. El central ya está recuperado de su lesión, pero todavía no ha reaparecido y podría hacerlo el domingo.