Sevilla,

Antonio GUTIÉRREZ / Efe

El Barcelona no baja los brazos en la Liga, sacó al Sevilla del campo y se llevó tres puntos con un incontestable 0-2 ante un rival que en la segunda parte le puso más interés, pero sólo eso. Esta vez no estaba Javi Varas en el portal andaluz para detener todas las intentonas azulgranas como sucedió en la primera vuelta en el Camp Nou.

Salió el Barça sin dar ni un minuto de tregua, con ganas de enseñar su poderío y de hacer ver que aunque tiene muy difícil revalidar el título de Liga por su desventaja con el Real Madrid, no va a darle a éste ninguna facilidad.

El ex sevillista Adriano ya hizo trabajar a Palop a los siete minutos, y poco después fue Pedro el que lo intentó ante al meta local, en pleno vendaval azulgrana ante un Sevilla que lo único que podía hacer era correr tras la pelota.

Una falta sobre Adriano de Spahic, quien fue duda por lesión hasta minutos antes del choque, fue el preludio del primer gol azulgrana, pues Xavi Hernández se sacó un magnífico lanzamiento al que no pudo responder Palop.

Parecía que al Barcelona le hacía falta ganar en el Sánchez Pizjuán por goleada para lograr algún título, porque tras el 0-1 no paró de atosigar a un Sevilla perdido y sin capacidad de reaccionar.

Iniesta tuvo cerca el 0-2, pero se le fue el balón desviado, lo que no le ocurrió al argentino Leo Messi en una de sus habituales espléndidas jugadas, con caño incluido, que la concluyó con un sutil toque por encima de Palop.

El 0-2 cuando aún no se había cumplido la media hora pareció hacer que el Barcelona levantara el pie del acelerador, y ello le valió al equipo de Míchel para sacudirse el absoluto dominio del adversario. Del Moral puso a prueba por primera vez a Valdés, repitiendo poco después al aprovecharse de una indecisión entre el portero y Piqué para encontrar un remate que acabó con el balón repelido por el larguero.

En esta última fase del primer período el juego se equilibró algo, al tener el Sevilla algo más de tiempo el balón y montar algunas combinaciones trenzadas, aunque eso también valió para que el Barcelona, en las botas de Pedro y Messi, encontrara espacios y estuviera cerca de conseguir el tercero.

En la segunda parte se mantuvo la progresión del conjunto andaluz, y el Barcelona sí parecía tener en cuenta el marcador a su favor para no forzar más de lo necesario. Los minutos pasaron sin mucha historia, porque quizá todo lo que tenía que suceder ya se había visto en la primera parte, aunque Iniesta falló una clarísima ocasión ante Palop para incrementar la ventaja.